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El presidente de Esquerra en Balears, Joan Lladó, confirmó ayer la postura de su formación de que es «necesario» convocar elecciones anticipadas para poder restablecer la estabilidad política en el archipiélago. «Los ciudadanos mandan y la gran mayoría de políticos que fueron votados han sido cesados o imputados, por lo que Antich debería permitir que el pueblo vuelva a hablar, y solo puede hacerlo convocando nuevas elecciones», aseguró Lladó durante la presentación de la nueva sede de la formación nacionalista en Palma.
Joan Lladó aseguró que su partido no está dispuesto a gobernar «a cualquier precio», como ya demostró el pasado 18 de diciembre cuando sus siete cargos ejecutivos dejaron sus puestos en el Govern, Consell y Ajuntament de Palma, al faltar varios miembros de UM al código ético. «Esquerra siente que los ciudadanos respetan a esta formación por no gobernar de cualquier manera», recalcó el presidente de Esquerra en las islas.
Pactos futuros
Joan Lladó quiso dejar claro que «no cierra sus puertas» y volvería a pactar con UM si esta formación «demuestra que no ha sido financiada de forma irregular» y presente de cara a los comicios unas listas «renovadas y con personas honestas».
Así, el presidente de la formación nacionalista mostró su confianza en la «honestidad» del actual presidente de UM, Josep Melià, a quien tildó de «nacionalista de verdad», pero recordó que en estos momentos «UM no es Melià, sino muchas otras cosas más».
Por su parte, el secretario de Organización de Esquerra, Joan Miquel Chacón, señaló que la nueva sede del partido, ubicada en la plaza Sant Antoni de Palma, marca «un paso adelante» y tras los últimos años «Esquerra ya no es aquel partido simpático que obtenía resultados de tasa de alcoholemia», al tiempo que destacó la importante representación municipal que ostenta el partido en Mallorca e Ibiza.
Durante la presentación de esta nueva sede, estuvieron presentes representantes de otras formaciones como portavoz adjunto del PP balear, Toni Fuster y la diputada 'popular' Sandra Morell, así como el senador socialista por Mallorca, Xavier Ramis, el parlamentario del Bloc Miquel Àngel Llauger y el director general de Movilidad del Govern, Antoni Verger (PSM).