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A pesar de cierta incertidumbre esta semana, la alcaldesa de Palma, Aina Calvo, garantizó ayer que la financiación del futuro palacio de congresos no corre peligro a pesar de la restricción para solicitar crédito aprobada por el Gobierno y de la salida del proyecto del Grupo Barceló. Así, las obras continúan a buen ritmo con el 50% de la infraestructura ejecutado; estará finalizada en otoño de 2011 y podrá funcionar, previsiblemente, a finales de ese mismo año.
En estos momentos, las obras están siendo financiadas con los 30 millones aportados por Govern balear y Cort a través de la sociedad participada del palacio de congresos y la concesionaria que ocupe el puesto dejado por Barceló tendrá que hacerse cargo de los 120 millones que faltan para terminar la infraestructura.
Seis zonas de trabajo
Las obras se dividen en seis zonas, de forma que en estos momentos se está acabando la estructura del hotel y la estructura de la cubierta de la sala de exposiciones y auditorios. Además, se está finalizando la estructura de la fachada sur del palacio, que da al mar.
Según el arquitecto del proyecto, Francisco Mangado, las divisiones interiores están muy avanzadas y las habitaciones del hotel están hechas en la sexta planta. A su vez, se está trabajando en las bases del suelo que garantizan un correcto aislamiento térmico y acústico. Posteriormente, se irán completando todos los revestimientos interiores.
Actualmente, la construcción del palacio da trabajo a un centenar de empleados y, una vez que su construcción esté lista, durante el verano, se empezará a trabajar completando los revestimientos del complejo y con los cierres e instalaciones. «La fase de instalación es tediosa, ahora hay que rellenar las tripas y son muy poco vistosas», explicó el arquitecto, Francisco Mangado.
El auditorio principal del palacio de congresos tendrá una capacidad de 2.010 butacas, la sala principal de exposiciones tendrá una amplitud de 1.665 metros cuadrados y la menor, de 701 metros. La extensión de las salas de reunión asciende a los 1.412 metros cuadrados y todas contarán con luz natural, mientras que el hotel de cuatro estrellas que se comunicará con el palacio de congresos mediante una pasarela dispondrá de 268 habitaciones.