Un 54 por ciento de las recetas que dispensan los facultativos del Servei de Salut (IB-Salut) ya son electrónicas y esta modalidad de receta ya está implantado en el cien por ciento de la red de Atenció Primària de las Islas.
El objetivo del Servei de Salut es que este sistema, del que Balears es pionera en todo el Estado, esté implantado a finales de este año en todos los hospitales públicos de las Islas.
Farmacias
De hecho, según los datos que baraja el IB-Salut y la Conselleria de Salut i Consum, en los últimos doce meses, el 35,6 por ciento de los pacientes de la sanidad pública balear (uno de cada tres) que ha requerido prestación farmacéutica la ha obtenido a través de la receta electrónica.
El proceso de implantación progresivo del servicio de receta electrónica empezó en septiembre de 2006 en Eivissa y continuó en abril del mismo año en Mallorca.
Este sistema permite prescribir el medicamento, dispensarlo y facturarlo en soporte electrónico. Para poder utilizarlo el paciente se tiene que acreditar con la tarjeta sanitaria individual en la consulta médica.
De esta manera el médico accede a la historia clínica del paciente y le prescribe los fármacos adecuados a sus necesidades médicas. La prescripción es firmada electrónicamente por el médico y queda registrada en la historia clínica.
Racionalización
Cuando el paciente llega a la oficina de farmacia, únicamente tiene que presentar la tarjeta sanitaria y el farmacéutico accede, a través de un sistema informático, a las prescripciones pendientes que tiene el paciente y así le puede abastecer de los fármacos.
Este sistema de prestación farmacéutica a través del soporte informático permite, según la Conselleria de Salut i Consum, la racionalización del gasto sanitario, puesto que el 88 por ciento de los medicamentos expedidos son genéricos -más económicos que los fármacos de marca- y facilita la tarea de los médicos, especialmente de los mas de 740 que trabajan en los centros de Atenció Primària de las Islas y que no tienen que dispensar a mano las recetas farmacéuticas de sus pacientes.
Aunque en sus inicios la implantación de la receta electrónica creó más de un problema informático en las farmacias de las Islas, actualmente ya se utiliza como sistema habitual de dispensación de medicamentos.
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
A mi, con este sistema hay algo que no me gusta: si el médico te da la receta impresa, tu puedes irte a tu casa y comprobar si aquel medicamento ya lo tienes de alguna otra vez, empezado pero no caducado (por ejemplo pastillas) para aprovecharlo. No puedes acordarte del nombre de cada medicamento que puedas tener en tu casa, y además a veces te dan varios... ¿Cómo puedes saber si lo tienes? Además, si te la da el médico, pides la copia que se recorta en la farmacia y ves escrito cuantas tomar, cada cuanto tiempo y durante cuanto tiempo. Con la receta electrónica, si quieres que te la impriman en la farmacia la tienes que pedir, sino no te la dan, en cambio con la que te entrega el médico ya la tienes y no la tienes que pedir en la farmacia. Con la electrónica no sabes que te ha recetado el médico (y menos si son varias) y vas a buscarla a la farmacia: cuando llegas a tu casa ves que aquellas pastillas (o varios medicamentos) ya los tenías y podrías haberlos aprovechado. Ellos se ahorran el papel, pero a nosotros esto nos puede llegar a salir caro.