Margarita Nájera, en la Platja de Palma. | Teresa Ayuga

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El plazo para presentar las alegaciones al plan de reconversión integral (PRI) de la Platja de Palma finalizó ayer a las 14:00 horas, momento en el que se habían presentado más de 1.000 alegaciones; la mayoría de ellas sobre Can Pastilla y el torrent des Jueus. Sin embargo, la gerente del Consorcio de la Platja de Palma, Margarita Nájera, puntualizó que a lo largo de la próxima semana llegarán más alegaciones, las que se han presentado a través de los ayuntamientos de Palma y Llucmajor o de la Delegación del Gobierno.

Inquietud vecinal

El PP de Palma también presentó ayer las alegaciones, 172 según su presidente José María Rodríguez. De ellas, 15 son de carácter general y 157 técnico y específico. Rodríguez destacó que aunque ayer acabó el plazo para presentar alegaciones «no acaba la inquietud, desazón y malestar de unos 1.000 vecinos que en su totalidad o parcialmente se pueden ver afectados por los derrumbes». Ante las numerosas alegaciones presentadas, el PP de Palma pide que se retire el PRI y se empiece a redactar una propuesta en base a las alegaciones. Sin embargo, Rodríguez puntualizó que esto «no significa renunciar al proyecto, sino iniciar hoy mismo un proyecto consensuado»; por lo que aseguró que no supondrá retrasarlo.

La regidora del PP Lourdes Bosch explicó las alegaciones que han presentado y destacó que se producen agravios comparativos en el PRI, no se cumple lo establecido en el master plan, que se deja fuera de ordenación a centenares de viviendas, que se recalifica suelo de manera urbanizable o rústico de manera ilegal, etc.