Sebastián Escarrer, Jaume Cladera, Joan Mesquida, Rafael Gil, Marilén Pol y Pablo Piñero.

TW
0

«Sobrerregulación, dispersión normativa, falta de homogeneidad en materia turística y un excesivo intervencionismo de las administraciones». Estos son algunos de los principales impedimentos para que las empresas del sector turístico puedan expandir su actividad, según Sebastián Escarrer, vicepresidente de Sol Melia.

Una afirmación que fue apoyada por el resto de hoteleros que participaron ayer en una charla sobre los retos de futuro del sector, dentro del I Congreso Nacional de Derecho del Turismo celebrado en el Colegio de Abogados de Balears.

Sobreoferta y futuro

Otro puntos en el que coincidieron los hoteleros fue en que hay una sobreoferta de plazas turísticas y en que una parte de las infraestructuras están obsoletas, por lo que reclamaron fórmulas legales que favorezcan la inversión y la salida del mercado de la oferta que ya no tiene futuro empresarial.

Por su parte, el secretario general de Turismo y Comercio Interior, Joan Mesquida, coincidió con el sector en la necesidad de «limitar la oferta de alojamiento», al tiempo que destacó la mejora de su calidad. Otros retos planteados por Mesquida fueron intervenir en la oferta madura, promover la coordinación entre administraciones, y entre el sector público y el privado en cuestiones como la promoción turística, la apuesta por las tecnologías y la formación permanente y por los mercados emergentes.