El conseller balear de Educació, Bartomeu Llinàs, aseguró ayer en conferencia de prensa que «la FP ha sido materia de actuación prioritaria para la Conselleria durante esta legislatura y, además, una de las áreas que menos se han resentido por la crisis económica».
Inserción laboral
Por su parte el director general de Formación Profesional y Aprendizaje Permanente, Miquel Mestre, subrayó en la presentación del balance educativo que las garantías de inserción laboral desde la FP «son muy elevadas», con «el total de los titulados en el caso de los estudios de fabricación, mecánica y madera y mueble; un 89% para los de instalación y mantenimiento; 85% en hostelería y turismo, y un 80% en electricidad».
El conseller Llinàs afirmó también que junto al optimismo de su departamento por los resultados de los últimos años, «la FP tendrá aún mejores resultados cuando la formación reglada y la formación dedicada a la ocupación trabajen cada vez más conjuntamente», de forma que resulten «cada vez más maridadas como causa y efecto».
En cuanto a la formación de adultos, la matrícula aumentó un 9% respecto al año pasado -hay 16.517 alumnos-, lo que el conseller atribuye al hecho de que «es más fácil insertarse en el mercado laboral con una cualificación básica o profesional».
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