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El propietario de la cadena hotelera Grupotel, Miquel Ramis, a quien el juez instructor del caso Palma Arena atribuye haber dado empleo a Maite Areal, esposa del ex presidente del Govern, Jaume Matas, a petición de éste y como «dádiva» al ex jefe del Ejecutivo autonómico, ha solicitado la suspensión de la declaración que tiene prevista el próximo lunes como imputado al alegar que se encuentra enfermo.

Así lo han informado fuentes jurídicas a Europa Press, que han señalado que su defensa ha presentado un escrito junto a un certificado médico ante el titular del Juzgado de Instrucción número 3, José Castro, en el que solicita el aplazamiento de la comparecencia en el marco de la pieza número 6 de la causa. No obstante, el magistrado no se ha pronunciado por el momento sobre la petición sino que previsiblemente lo hará el mismo lunes.

En una providencia dictada por Castro, el magistrado asevera que existen «indicios racionales» sobre la relación laboral mantenida entre Areal y la entidad Valparaíso S.A., perteneciente a Ramis, que «representa un revestimiento de lo que en realidad fue una dádiva solicitada personalmente por el entonces presidente» y que finalmente «le fue concedida».

De este modo, el juez ha emplazado a Ramis a comparecer en calidad de encausado en el marco de la pieza número 6 del caso, después de que el pasado mes de diciembre el hotelero ya depusiera como testigo y afirmase que, tras darle trabajo en el hotel Valparaíso a petición de Matas, Areal cobró por ello 60.000 euros brutos durante 2007, pactados de forma verbal y sin la existencia de un contrato laboral de por medio.

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En aquella comparecencia, Ramis recordó que después de que el ex jefe del Ejecutivo autonómico le solicitara un puesto para su mujer, se creó una plaza para ella como relaciones públicas por un año, pese a negar que se hiciese como un «regalo». El empresario, que se ratificó así en la declaración que ya prestó en dependencias de la Guardia Civil, manifestó que Areal no tenía un horario determinado ni tampoco despacho, y que no controlaba si el trabajo de la mujer de Matas era fructífero.

Se da la circunstancia de que en la declaración el magistrado ya advirtió al empresario de que podría ser imputado aunque finalmente salió de la comparecencia como testigo.

ROMERO DECLARARA EN LA PIEZA 23

Mientras tanto, para el mismo lunes Castro ha citado al director de la agencia de comunicación Nimbus, Miquel Romero, quien depondrá también como imputado en la pieza número 23 del caso, relacionada con las facturas emitidas por esta empresa a la Fundació Illesport, el Govern y el consorcio para la construcción del Palma Arena. En concreto, Nimbus está siendo investigada por haber servido como presunta intermediaria para financiar de forma ilegal al PP.

Cabe recordar que el caso Palma Arena, dividido en un total de 25 piezas, investiga un presunto desvío de más de cincuenta millones de euros durante la construcción del velódromo palmesano (2005-2007) y su posible conexión con el tren de vida llevado por Matas como máximo mandatario de la Comunidad balear, así como con una supuesta financiación irregular del PP.