Por primera vez uno de los radares del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) ha detectado una patera, la que el lunes llegó a las costas de Ses Salines con ocho inmigrantes, que una vez en tierra fueron detenidos. El delegado del Gobierno, Ramon Socias, se mostró satisfecho ayer de poder «aportar una novedad, y es que los radares esta vez sí han funcionado», pues, recordó, este sistema se instaló hace ocho meses, pero no detectó la patera que llegó a las costas de la Isla en octubre pasado. No obstante, el delegado reconoció que «aún hace falta afinar el dispositivo y mejorar detalles técnicos».
En la actualidad hay instalados siete radares y el que detectó la patera fue el de Cabrera, cuando ésta se encontraba a 23 millas de Mallorca. Socias explicó que se realizó el seguimiento durante unas cuatro horas, aunque a tres millas de la costa se perdió el rastro. Pero ya se había movilizado a las patrullas costeras y así se pudo localizar a los presuntos inmigrantes ilegales cuando bajaron a tierra.
En cuanto a los ocho argelinos que viajaban abordo, el delegado explicó que tardaron unas veinte horas en llegar. Al tratarse de ocho personas en una barca de entre 4 y 6 metros, con un motor de 25 caballos, el delegado añadió que «no se descarta que viajaran en una nave mayor que a cierta distancia soltara diversas barcas, como la que llegó a Mallorca».
Los ocho detenidos pasarán hoy a disposición judicial en el juzgado de guardia de Manacor y previsiblemente mañana, día 20, serán trasladados al centro de inmigrantes de Barcelona, desde donde serán repatriados a Argelia.
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