Francina Armengol durante una de sus réplicas al portavoz del PP (izquierda, junto a las banderas). Fotos: SEBASTIA AMENGUAL

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La presidenta del Consell, Francina Armengol, y la portavoz del Bloc, Joana Lluïsa Mascaró, evitaron ayer cualquier cuestión polémica en el último debate de política general del actual mandato, incluida la que ha motivado el proyecto de vía conectora, que sustituye al segundo cinturón que dejó diseñado el PP en la legislatura anterior. La propia Mascaró, nada más comenzar su intervención, minimizó la importancia de esa polémica y afirmó que esas diferencias eran 'normales' en los gobiernos de coalición.

Desactivada esa polémica, el pleno de ayer perdía uno de los ingredientes que más animan al PP: la exhibición pública de diferencias entre los socios de gobierno.

Francina Armengol, que en unos meses luchará en la reelección para presidir el Consell, optó por abrir el debate con un discurso muy genérico y que parecía más propio para una celebración institucional que para un debate de política general. Armengol, consciente de que las elecciones están a la vuelta de la esquina, evitó cualquier tipo de anuncio y no concretó ninguna propuesta nueva. Dedicó el grueso de su intervención a reivindicar el trabajo hecho y a poner en valor la importancia del Consell frente a las voces que lo ponen en cuestión. Además de reivindicar «más competencias», dijo en un momento de su discurso -sólo elogiado por su partido, el PSOE-que «en Mallorca, el único gobierno que nos representa exclusivamente en nuestra aspiración de más proximidad con la ciudadanía, es el Consell».

A la Fiscalía

Hecha esta autoafirmación, que trufó con llamamientos a recuperar el optimismo y la autoestima (y que para el portavoz de UM, Antoni Pascual, no fue más que «un discurso de autobombo»), sólo cabía esperar al discurso de Fernando Rubio, portavoz del PP, que no será candidato. Rubio acabó con cualquier 'condescendencia' de la etapa de Font y lanzó una reproche detrás de otro, incluso le echó en cara que algún caso de corrupción fuera de esta etapa, en alusión al 'caso Cloaca', que no citó.

Armengol lo negó y dibujó un panorama negro de la época del PP, «en que se metía la mano en la caja». En un momento dado dijo que ella se había limitado a informar a la Fiscalía de los casos detectados y dijo algo que algunos interpretaron en clave de 'aviso': «Informamos a la Fiscalía y lo haremos las veces que haga falta».

José Ramón Bauzá y María Salom acudieron a escuchar la intervención de Rubio. Se fueron nada más acabar y sin quedarse a las réplicas.