Enfermos de alzheimer y voluntarios, en el Castillo de San Carlos.

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Los voluntarios de las asociaciones de enfermos de las Islas juegan un importante papel a la hora de que las personas que sufren distintas patologías puedan salir a la calle a disfrutar de actividades sin que éste hecho repercuta en sus cuidadores habituales.

La Associació Familiars Alzheimer de Mallorca (Afam), al igual que otras muchas asociaciones de enfermos de las Islas, dispone de un programa de voluntariado diseñado para contar con un equipo humano voluntario y así poder dar respuesta a las necesidades de respiro y tranquilidad de las personas que cuentan con un enfermo de alzheimer a su cargo.

Miquel Ferrer es uno de estos voluntarios que dedican parte de su tiempo a ayudar a personas que sufren de alzheimer y que estos días ha organizado una excursión con 12 enfermos de alzheimer al Castillo de San Carlos.

«Lo que hacemos los voluntarios es organizar actividades, generalmente fuera de la asociación, como ésta excursión al Castillo de San Carlos», explica Ferrer y añade que se hace con la intención ayudar a los pacientes y a sus cuidadores, que generalmente son familiares de los enfermos.

En concreto en la actividad del Castillo de San Carlos participaron, además de los enfermos, un voluntario, dos cuidadores y una psicóloga de apoyo.

Deterioro cognitivo

La enfermedad de alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa, que se manifiesta como deterioro cognitivo y trastornos conductuales. Se caracteriza en su forma típica por una pérdida progresiva de la memoria y de otras capacidades mentales, a medida que las células nerviosas mueren y diferentes zonas del cerebro se atrofian.