El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha destacado el carácter abierto de las economías de Balears y Catalunya como elemento que las favorecerá para salir de la crisis. ISLAS BALEARES POLÍTICA ESPAÑA EUROPA presidentes artur mas jose ramon bauza | Europa Press

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El president balear, del PP, y el president catalán, de CiU, coincidieron ayer en la necesidad de los recortes, que llamaron «ajustes», para hacer frente a la actual situación de crisis. Tanto el president balear, José Ramón Bauzá, como el president de la Generalitat de Catalunya, Artur Mas, recordaron que ambos tienen que hace frente al déficit heredado de gobiernos multipartitos («en Cataluña un tripartito, aquí un hexapartito», según el president de las Islas) que ha derivado en que las dos comunidades han alcanzado un déficit idéntico del 4,2 % del PIB, muy superior al autorizado.
La de ayer era la primera visita de Artur Mas a Balears desde que asumió la presidencia de la Generalitat. Aunque el asunto principal de la agenda era el Institut Ramon Llull, ambos abordaron otras cuestiones, concretamente, aquellas en las que sintonizan. Por ejemplo, y Mas lo citó expresamente durante su comparecencia ante los medios de comunicación, no se trató la decisión del Govern balear de considerar el catalán un mérito y no un requisito para acceder a la función pública. Mas dijo que tiene por norma «ser muy prudente» respecto a los acuerdos de otros gobiernos. Artur Mas respondió en catalán a todas las preguntas y el president balear, fiel a su norma, respondió en castellano cuando las preguntas eran en esa lengua.
Donde sí ofrecieron una total sintonía, incluso Bauzá ofreció a Mas la posibilidad de explicar «cuál es la realidad» de las medidas más polémicas que se han tomado en Catalunya, como «el cierre» de hospitales.
Los dos mandatarios hicieron especial hincapié en la necesidad de tomar medidas que estabilicen la economía. «No lo tenemos fácil, pero sabemos que es posible», dijo Artur Mas.
Presupuestos de 2012
Tanto el president de las Islas como el de Catalunya dejaron claro que todos los «ajustes» que están tomando son para garantizar el mantenimiento del estado de bienestar e incidieron en que no deberían afectar a la educación y a la sanidad. Mas, sin embargo, apuntó un dato: que la sanidad catalana arrastraba un déficit de 850 millones.
El president de la Generalitat defendió los ajustes llevados a cabo en el ámbito sanitario que, dijo, «procuran no tocar lo que es esencial en las prestaciones sanitarias». Bauzá incidió en el mismo argumento y destacó que no se plantea ni tan solo modificar las prestaciones básicas» sanitarias, pero sí hacer ajustes.
Ambos presidentes también destacaron la importanica de la cultura en sus relaciones.