Un barco de mercancías atracado en Palma. | Gabriel Alomar

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La Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca (PIMEM) alertó ayer de la «precaria» situación del transporte marítimo de las mercancías calificadas de peligrosas, como el oxígeno, el cloro y el gas butano, así como del riesgo de su desabastecimiento, que tendría consecuencias sobre la vida de los isleños.

En un comunicado, la patronal explica que la carencia de estos suministros puede poner en peligro el normal funcionamiento de las Islas e incluso la vida de las personas, ya que diariamente se precisa de oxígeno y gases para los hospitales, ácidos para la depuración de agua potable y piscinas, gases para la industria auxiliar, combustibles domésticos como el butano y combustibles industriales como el gas natural licuado.

Todo este material, denominado peligroso, llega a la isla casi a diario desde la Península por vía marítima.