El conseller de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio, Biel Company, hoy durante el pleno del Parlament. | Teresa Ayuga

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El conseller d'Agricultura i Territori, Gabriel Company, anunció ayer que el decreto urbanístico que convalidado por el Parlament tendrá «retoques» durante la tramitación parlamentaria. Será posible porque, a pesar de que el decreto está en vigor desde que lo aprobó el Consell de Govern, el Ejecutivo ha decidido que la norma se tramite como proyecto de ley: habrá por tanto debate parlamentario y los partidos podrán presentar propuestas para modificar el texto.
El decreto fue el tema estrella de la sesión plenaria de ayer. El conseller Gabriel Company defendió el texto remitido al Parlament porque generará seguridad jurídica y porque permitirá que se realicen inversiones en el territorio que ahora están paralizadas. Company aseguró además que el texto posibilitará la legalización de parcelaciones ilegales que están construidas desde hace años. En cualquier caso, la última palabra tanto para la construcción de nuevas urbanizaciones como la regulación de las parcelaciones quedará en manos de los municipios, a quienes el Govern faculta para que den las autorizaciones preceptivas.
Urbanismo a la carta
No lo ve igual la oposición, que ayer denunció que este decreto es la consagración del «urbanismo a la carta». Para el socialista Jaume Carbonero, el decreto provoca una enorme inseguridad jurídica ya que convierte en discrecionales les decisiones en materia de urbanismo. Explicó que, a voluntad de los alcaldes, en unos municipios se podrán hacer actuaciones que en la localidad vecina estarán prohibidas. Lamentó además que el Govern no haya intentado consensuar el decreto con la oposición, pese a que Bauzá ofreció a los partidos un pacto por el territorio.
En términos parecidos se expresó Antoni Alorda, en representación del PSM-IV-ExM. Aseguró que, con este decreto, el PP ha demostrado de nuevo que es el partido de la «balearización, que la esconde sólo cuando está en la oposición». Para Alorda, «escuchar el PP que en Balears se ha urbanizado poco nos da escalofríos». También reprochó la falta de consenso de los populares en un tema esencial para las Islas.