La ampliación y mejora de los Muelles de Poniente y Paraires ha venido aparejada con la adquisición de pasarelas elevadas automóviles para eliminar la circulación de pasajeros sobre los muelles. Con el objetivo de mejorar las condiciones de orden, comodidad y seguridad en las operaciones de embarque y desembarque, se ha optado por eliminar el tránsito peatonal fuera de las áreas exclusivas.
Según la Autoritat Portuària, el aumento en el tráfico de grandes cruceros y la consolidación del puerto de Palma como uno de los principales destinos del Mediterráneo ha exigido una modernización y adaptación de las instalaciones a los requerimientos de operabilidad de los nuevos buques. Aún así, el atraque de unidades pertenecientes a la nueva generación de cruceros, equipados con botes salvavidas que sobresalen de los laterales del barco, ha obligado a adquirir las dos nuevas pasarelas que permiten realizar el embarque/desembarque sin interferir con los botes, tanto en la alineación sur de los muelles de Poniente (estación marítima número 1), como en el muelle de Paraires (estación marítima número 3). Las nuevas pasarelas están constituidas por túneles longitudinales, estructura de pórticos y cabina de atraque, que unen las pasarelas fijas o bien directamente las estaciones marítimas, con el extremo de acoplamiento del buque.
Con una vida útil de 20 años, estas pasarelas admiten una carga de 300 kilogramos por metro cuadrado y soportan rachas de viento de 100 kilómetros/hora en servicio y 150 aparcadas. Con un presupuesto de adjudicación de 2.206.125 euros, las obras dieron comienzo el pasado día 1 de octubre y debían finalizar el próximo 15 de abril. Este adelanto de dos semanas permitirá ya su uso durante la Semana Sana, coincidiendo con el incio de la temporada turística de cruceros.
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