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Los seis hijos varones del empresario jerezano José María Ruiz-Mateos Jiménez de Tejada, atribuyeron ayer a su padre todas las decisiones de índole económica en las operaciones de compraventa de hoteles en Mallorca en el transcurso de sus respectivas declaraciones en calidad de imputados ante la juez de refuerzo de Instrucción 3, María Pascual.

Tal y como han ocurrido en otras dos causas abiertas en Palma, Álvaro, José María, Javier, Zoilo, Alfonso y Pablo Ruiz-Mateos Rivero, culpan a su padre de los hechos investigados.

Fe ciega

«Teníamos fe ciega en él», resumieron ante la jueza, que amplió contra el patriarca y sus vástagos la querella por sendos delitos de alzamiento de bienes y delito societario a instancias de la defensa del empresario Francisco Miralles, ejercida por la abogada Isabel Fluxá.

En la ampliación de la querella se investiga la transmisión por parte de Montumo S.L. del hotel Cervantes de Torremolinos a la entidad mercantil Clesa, empresa del grupo Rumasa, con el que se había avalado la compra del hotel Eurocalas en 2006. José María Ruiz-Mateos y sus seis hijos tienen prohibido salir de España por uno de los jueces de Palma que investiga una de las querellas y también deben pagar una fianza civil de 18,5 millones de euros.