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La Autoritat Portuària de Balears (APB) rebajará más de un 40% las tasas a los buques y las de pasaje a las navieras que operen en los puertos estatales de las Islas en 2013, con el objetivo de incrementar la cuota de mercado en la escala de cruceros y el número de cruceristas, según indican desde la APB.

«El objetivo es aumentar la actividad comercial en un sector creciente, como es el turismo de cruceros, y optimizar los recursos e infraestructuras de los cinco puertos estatales, caso de Palma, Alcúdia, Maó, Eivissa y La Savina. Hay que ofrecer el mayor número de incentivos porque la competencia ha aumentado mucho en todo el Mediterráneo», señalan las mismas fuentes.

Evolución

La evolución del turismo de cruceros en 2012 ha sido negativa respecto a 2011, principalmente porque en el pasado año «Balears se vio beneficiada por los efectos de la primavera árabe, lo que propició un desvío de cruceros del norte de Africa a los puertos europeos, beneficiándose con ellos los de Balears».

La estadística de la Autoritat Portuària de Balears sobre el movimiento de buques y cruceristas en el acumulado enero-noviembre, registra que en el Port de Palma ha bajado un 23% la cifra de cruceros, de 535 escalas a 412, mientras que en el de Maó el descenso ha sido de un 4% (de 78 a 75), en Eivissa ha subido un 15% (de 123 a 145) y en La Savina ha bajado un 56% (de 9 a 4 buques).

La cifra de cruceristas está siendo dispar, ya que mientras en el Port de Palma ha bajado un 31% en los once primeros meses (de 1.437.540 a 988.294), se ha mantenido estable en Maó (de 53.000 cruceristas de 2011 a 54.272 este año), pero en Eivissa el alza ha sido de un 103%, al pasar de 131.030 cruceristas a los 262.925 del actual ejercicio.

Es, precisamente, el Port de Palma el que más se va a beneficiar de esta nueva política de bonificaciones. Desde la APB afirman que lo que se quiere incrementar es la estrategia de potenciar Palma como base de cruceros, así como el número de escalas, para así competir con los puertos franceses, italianos, así como con Barcelona y Valencia.

«Disponer de la base de cruceros implementa al máximo todas las infraestructuras portuarias y beneficia, además, a Palma y a todo el tejido productivo empresarial que da servicio como proveedor a las navieras de cruceros durante su estancia en el Port», comentan.

El turismo de cruceros, en este sentido, tiene un gran impacto en lo sectores de restauración, comercio, oferta complementaria y de transporte, incrementando los ingresos y volúmenes de negocio. Con las bonificaciones a las navieras se pretende ofrecer el mayor número de incentivos para generar una mayor actividad en 2013.