«Será esta semana», ha indicado a EFE un portavoz de la empresa tras confirmar que hoy no se ha planteado la solicitud de entrada en concurso de acreedores antes de las 15.00, hora del cierre del registro en los juzgados de lo mercantil de la capital balear.
Orizonia se declaró el pasado 15 de febrero en preconcurso, lo que abría un periodo de cuatro meses en el que se blindaba contra cualquier posible petición de concurso por parte de sus acreedores, pero pocos días después la compañía turística anunció su cierre y la venta fraccionada de sus activos.
El grupo Barceló adquirió 157 agencias de viajes de la red de Vibo y la filial de su aerolínea Orbest en Portugal, lo que permitirá salvar unos 1.100 empleos de los casi 4.200 con los que contaba la empresa quebrada.
Además, otros 700 empleados de la división hotelera Luabay de Orizonia seguirán trabajando gracias al acuerdo que se alcanzó el pasado mes de diciembre con Globalia.
El pasado día 7, el grupo turístico presentó un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) ante el Ministerio de Empleo y Seguridad Social que afecta a toda la plantilla restante: 2.329 trabajadores.
La empresa había anunciado a los representantes de los trabajadores que esta mañana presentaría el concurso de acreedores con el propósito de agilizar al máximo todos los trámites precisos para que los trabajadores que pierden su empleo puedan cobrar las prestaciones que les correspondan en el plazo más corto posible.
A pesar de la demora de hoy, fuentes de Orizonia han insistido en que en los próximos días se cumplirá con el trámite judicial.
Orizonia tiene pendiente de cobro a sus clientes unos 28 millones de euros por las ventas realizadas antes de su cierre, con vencimientos a corto y medio plazo.
Para la parte social, dicha cantidad de dinero es un elemento positivo que podría permitir a los trabajadores el cobro de las nóminas este mes de marzo, lo que en estos momentos es el primer objetivo de la negociación.
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Chorizonia no tiene ningún horizonte ético.