Pere Palau, a la derecha con la mano al frente, presidió el pleno del Parlament. En primer plano, el conseller José Vicente Marí, que intervino para hablar de los Presupuestos. | M. À. Cañellas

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El PSIB acusó ayer al PP y al Govern balear de acudir «derrotados» a la negociación para mejorar los Presupuestos del Estado y mejorar el sistema de financiación. Después de que el conseller d'Hisenda, José Vicente Marí, dijera en el pleno del Parlament que aunque «ha hecho todo lo posible», no se ha podido llegar a la media de inversiones, tanto el PSIB como Més pronosticaron cuál sería el siguiente paso del PP: no presentarán ninguna enmienda al proyecto de Presupuestos. El plazo finaliza el próximo viernes en el Congreso. Tanto Francina Armengol como Biel Barceló instaron al president Bauzá a que pidiera a los diputados estatales que presentaran propuestas o que votaran las de la oposición.

Bauzá optó por una declaración genérica. Aseguró que «seguiremos reclamando lo que nos toca ante el Gobierno que sea». También reiteró que le parece «injusto» el nivel de inversiones planteado por el Ejecutivo.

No hay documento

El debate sobre la financiación marcó la mayor parte de la sesión plenaria -la primera con Bauzá después de dos semanas ausente- pero ni Govern ni oposición cambiaron ni un ápice sus convicciones previas. Según el conseller, nunca llegaron las inversiones estatutarias previstas, ni siquiera en la época de Zapatero. Los socialistas argumentan que debían haber llegado 2.800 millones. Según Marí no hay «ni un documento» que refleje ese compromiso. También discreparon sobre el dinero del convenio de carreteras. Según Bauzá, ese fue un logro del Govern. El PSIB le recordó que no había llegado nada. Según Bauzá, lo importante es que ya está firmado y llegará. Hubo un episodio curioso: una polémica sobre si fue el Govern de Antich o el de Matas el que recurrió el convenio de carreteras. Los dos tenían razón ya que se presentaron recursos en las diferentes fases del proceso.

El Parlament, en una reunión de la Comisión de Hacienda, aprobó (con algunos retoques) una propuesta presentada por el PSIB en la que se calificaban de negativas las cifras de inversiones y se instaba al Ejecutivo a realizar «todas las gestiones oportunas». También se pedía al Gobierno central que se situaran en la media estatal. El PP lo apoyó. Lo que no aceptó fue un mandato para presentar enmiendas.