Desde Cáritas remarcan que las entidades pueden ofrecer alimentos a todo el que lo solicite. | J. TORRES

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En Mallorca son muchas las entidades sin ánimo de lucro que trabajan para que todos los ciudadanos puedan comer. Más de quince entidades se esfuerzan a diario para hacer frente al incremento de personas con dificultades básicas. De acuerdo con la información del Instituto Nacional de Estadística (INE) que ayer publicó este periódico, el número de hogares con muchas dificultades para llegar a fin de mes se ha duplicado en 2013, pasando del 7,5 % al 18,4 %. En el 2012, el 24,2 % de la población balear vivía por debajo del umbral de la pobreza.

La primera recomendación de las entidades de carácter privado y público ante una situación problemática es acudir a los Servicios Sociales municipales. Así lo manifestaron desde el Institut Mallorquí d'Afers Socials (IMAS), organismo que se encarga de gestionar los servicios sociales, la protección de menores y recursos asistenciales. En los últimos años ha suscrito convenios de colaboración con varias entidades con el objetivo de llegar a más personas y también evitar duplicidades en los servicios.

Alimentos

La mayoría de entidades se dedican al reparto de alimentos, al ser esta la primera necesidad de las personas. El Banc d'Aliments se encarga de la recolecta que después distribuye entre las asociaciones dedicadas al reparto entre los demandantes. Asimismo, algunas entidades tienen servicio de comedores, donde los ciudadanos pueden acudir a comer. «En todas las organizaciones, todo el que lo necesita puede comer como solución de emergencia», indicaron desde Cáritas Mallorca.

Sin embargo, existen personas con necesidades que van más allá. «En Cáritas tenemos familias que solicitan ayudas por temas relacionados con el hogar o de medicamentos», indicaron desde la entidad. De cara al próximo año, tienen previsto poner en marcha dos centros de distribución alimentaria en dos barrios palmesanos como proyecto piloto.