La ley apunta en su disposición adicional segunda que las leyes de presupuestos «podrán reconocer progresivamente» esta imputación presupuestaria «en función de las disponibilidades de la hacienda autonómica y de los objetivos anuales de estabilidad presupuestaria».
Fuentes de la Conselleria d'Hisenda aseguraron ayer que el Govern se ha comprometido a pagar la deuda con los consells y a regularizar los pagos de anticipos que hizo el Govern del Pacte sin que quedaran registrados en ningún presupuesto. De hecho, dado que estas aportaciones se hicieron con cargo a la ley de financiación que ahora se aprueba, el Govern asegura que incluso podría reclamar la devolución de estas cantidades.
Menos dinero
El PSIB no lo ve en absoluto de la misma manera y en una rueda de prensa que ayer ofrecieron los socialistas Jaume Garau, Mercedes Garrido y Rosario Sánchez aseguraron que la ambigüedad de la ley es tal que no aclara qué pasará con el dinero que se había adelantado.
Los socialistas aseguraron que, de hecho, los consells recibirán menos dinero con esta ley que ni siquiera se ha tratado de consensuar con los partidos de la oposición para que tenga vocación de continuidad. La socialistas Rosario Sánchez aseguró que quien realmente gana con esta ley es el Govern y no el Consell de Mallorca, que perderá 16 millones por la no revisión del IPC , 11 millones por la reducción del convenio de carreteras y otros 25 millones de anticipos.
Salom
La presidenta del Consell, Maria Salom, discrepó totalmente con la versión de los socialistas y aseguró que la nueva ley garantiza el pago de la deuda y además prevé que los ingresos del Consell aumenten en el mismo porcentaje en que los hagan los de la Comunitat Autònoma.
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