Dos clientes, mirando ropa en un comercio. | ultimahora.es

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El comercio mallorquín de moda, calzado y complementos ha dado a febrero una nota global de 3,7 sobre 10 en cuanto a ventas y afluencia de clientes, lo que sitúa a este mes como «el peor febrero de la crisis económica».

Según el último barómetro de Pimeco, la patronal ha constatado la progresiva caída que ha sufrido la confianza de los comerciantes durante el último lustro, destacando que el mes de febrero de 2013 obtuvo una nota media de 3,8, mientras que la puntuación de febrero de 2012 fue de 3,9 y la del mismo mes de 2011 y del 2010 fue de 4. Paralelamente, febrero de 2009 alcanzó una nota de 4,4, y febrero de 2008 de 5,5.

La patronal ha señalado que ese mes ha sido el peor valorado desde marzo de 2013 (3,6 sobre 10), situándose a nueve décimas por debajo del mes de enero precedente (4,6) y a un punto por debajo del promedio del último año (4,7).

Solo un 6% mejora sus ventas respecto a 2013

En cuanto a la percepción de ventas de febrero, tan sólo el 6 por ciento de los comerciantes encuestados afirma haber mejorado las ventas que registró durante el mismo mes de 2013, frente a un 32 por ciento que mantuvo sus ventas y un 62 por ciento que sufrió una caída en su volumen de negocio.

En comparación a enero de este año, el porcentaje de comerciantes que en febrero vio descender sus ventas fue del 70 por ciento, mientras que una cuarta parte de los encuestados logró vender lo mismo y un escaso 5 por ciento disfrutó de mejores ventas.

La patronal ha remarcado la semejanza de los resultados entre Palma y el resto de la isla, ya que las ventas de febrero frente a enero empeoraron para el 68 por ciento de los comercios de la capital balear y para el 72 por ciento de los del resto de la isla. A su vez, un 6 por ciento de los comerciantes de Palma y un 4 por ciento del resto de Mallorca afirman haber vendido más.

Según Pimeco, la «alarmante caída» coincide con el mal resultado de las rebajas liberalizadas que, tal como indicaba la patronal en su 'Informe final de la campaña de rebajas de invierno de 2014', «han defraudado las expectativas de venta del 77 por ciento de los comerciantes minoristas del sector textil de Mallorca».

Ante estos resultados, la patronal ha dicho temer que el comercio minorista de la isla esté ante un «muy complicado» final de temporada baja, sufriendo a su vez el final de la racha de mejora interanual de las ventas de la que se disfrutaba desde abril de 2013.

«Sin signos de recuperación»

Los datos del barómetro, ha asegurado la patronal, corroboran el alcance de la retracción de las ventas de este tipo de bienes, ocasionado por una menor disposición de las rentas familiares y una disminuida exposición al gasto, lo que pone de relieve «que el consumo sigue estando sumido en la más completa atonía, sin que por el momento se aprecien signos significativos de recuperación».