Imagen de la primavera. | Xesca Serra

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La primavera que comienza hoy, a las 17.57 horas, se caracterizará en Baleares por ser ligeramente más cálida de lo habitual y con precipitaciones normales, aunque empezará con cierta inestabilidad este fin de semana, tras un invierno ventoso con temperaturas suaves y poca nieve.

La delegada territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) en Islas Baleares, María José Guerrero, ha explicado en una rueda de prensa las predicciones para esta estación, en la que las temperaturas irán subiendo poco a poco, con lo que el valor medio, al concluir la primavera, será ligeramente más alto.

La previsión es que lloverá pocos días y con intensidad variable, que comenzará con chubascos y tormentas intensas, granizo y nieve hasta lluvias débiles acompañadas de barro.

Los más destacable, ha señalado Guerrero, es que esta primavera comenzará con inestabilidad, que se hará presente ya este fin de semana, debido a un frente que llegará la noche del sábado y producirá un descenso de temperaturas, vientos, chubascos y tormentas, incluso podría nevar por encima de los 800 metros.

El frente dejará temperaturas de entre 14 y 15 grado centígrados y se prolongará hasta el próximo miércoles, cuando se retomarán las características habituales de la primavera.

Las previsiones para Semana Santa (del 13 al 21 de abril) hablan de temperaturas agradables, que oscilarán entre máximas de 20 y mínimas de 12 grados y con la probabilidad de que llueva todos los días; de forma más abundante, el lunes 14 y martes 15, y los que menos, el 17 y 18 de abril; no obstante, la probabilidad de que sople el viento fuerte se sitúa en torno al 15 %.

Durante la primera parte de la primavera, las situaciones anticiclónicas darán predominio a días soleados y noches con alguna helada débil y nieblas de origen marino que afectarán sobre todo a las costas, mientras el paso de frentes y borrascas podrían traer lluvias, tormentas, granizo, nieve, viento fuerte y frío.

No obstante, durante la segunda parte, los días se volverán más veraniegos, aumentarán las temperaturas y podrá registrarse alguna ola de calor; el paso de frentes y borrascas será menos frecuente y los días de precipitaciones disminuirán a medida que avanza la estación, con lluvias débiles y acompañadas de barro.

Quedan por delante 92 días y 18 horas de primavera, que concluirá el 21 de junio, ha detallado Guerrero, que ha hecho un balance del invierno, que se ha caracterizado por temperaturas suaves, poca nieve y un reparto desigual de las lluvias.

Este invierno ha sido más ventoso de lo habitual con rachas fuertes durante 26 días (frente a los 22 de media), en el que llegó a registrarse una de 144 kilómetros por hora en Alfabia, la segunda más alta en los últimos 20 años registrada en marzo.

Febrero se ha caracterizado como el más ventoso del invierno, que ha afectado de forma especial a Ibiza que, junto al mismo mes de 2010, ha tenido el segundo mes del año más ventoso de los últimos 30 años.

El invierno, con una temperatura media de 11,7 grados (anomalía de 0,7 por encima de lo habitual), ha registrado récord de temperatura media más alta en Sa Pobla, con 12 % (el anterior era 11,5 grados en 1988).

Enero ha sido un mes muy cálido, febrero cálido y diciembre normal; las lluvias dejaron 135,4 litros por metro cuadrado en Lluc el 20 de diciembre; mientras que solo nevó un día: el 30 de enero en la Serra de Tramuntana, que dejaron de 3 a 4 centímetros de nieve por encima de los 900 metros.

Finalmente, la primera quincena de marzo ha sido ligeramente cálida con una anomalía de 0,4 grados y muy seca, con un 70 % por debajo de lo normal, y una temperatura media de 12,2 grados.

Guerrero, tras haber un balance del tiempo, ha señalado también que la AEMET refuerza su presencia en las redes sociales, que tenían ya presencia en Twitter, a Facebook y Youtube.

Además, la delegada territorial ha presentado la aplicación METEONAV, accesible desde la web de la AEMET, que permite seleccionar una ruta marítima y proporciona vientos y el estado del mar previstos.