El PSIB ha pedido este miércoles la dimisión del vicepresidente y conseller de Presidencia, Antonio Gómez, y de la directora de la Abogacía de Baleares, Antònia Perelló, después de que la Audiencia Provincial de Palma confirmase que no hubo ningún tipo de delito por parte del Govern del Pacte con el tema de los complementos salariales y, por tanto, según los socialistas, haya quedado demostrado que el Govern usó los recursos públicos «en beneficio de una campaña particular» de «venganza» del presidente José Ramón Bauzá.
En rueda de prensa, el socialista Antoni Diéguez ha recordado que la misma semana en la que, en el pleno del Parlament, en junio de 2012, el diputado del PSIB, Vicenç Thomàs, aseguró que «Bauzá necesitaba 10.000 euros mensuales» para pagar sus hipotecas, el Govern anunció que llevaría a la Fiscalía la gestión de Thomàs en el tema de los complementos médicos al entender que podrían darse los delitos de prevaricación, malversación y fraude.
Diéguez ha considerado que esto fue una «reacción visceral del Govern» y ha remarcado que el hecho de que la Audiencia Provincial haya negado todos estos delitos representa «un fracaso del vengativo Bauzá y de su fiel ayudante, Gómez, quien coordinó los servicios de la Abogacía en una venganza particular de Bauzá y no al servicio de todos los ciudadanos».
El socialista, quien ha destacado la trascendencia mediática que tuvo este tema en su momento, ha recordado también que el Govern, meses después de llevar este asunto a Fiscalía, hizo una ley para reconocer la legalidad de los complementos médicos.
La sentencia de la Audiencia, ha explicado, asegura que no se aprecia prevaricación, ni tampoco malversación o fraude. «Se archivó, se recurrió y la Audiencia ha resuelto indicando que no hay ningún indicio de nada, no hay ningún delito de ningún tipo, se confirma el archivo en su integridad», ha manifestado.
«Está claro que Bauzá dio instrucciones en su momento, tras el problema de las hipotecas en el Parlament». Según ha declarado, Bauzá ha utilizado «los beneficios del poder» en su «beneficio y venganza».
Diéguez ha incidido también que Thomàs no ha sido llamado a declarar nunca por este tema, ni como testigo ni como imputado, por lo que la «operación de descrédito» del PP «ha fracasado rotundamente».
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