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El juez instructor del 'caso Nóos', José Castro, ha citado a declarar a tres altos cargos del departamento jurídico de Telefónica y a un empresario español por una transferencia de 12 millones de euros supuestamente relacionada con la causa, en concreto, con Iñaki Urdangarin.

El sábado 31 de mayo declararán en calidad de testigos los ejecutivos de Telefónica Enrique Medina, director de la Asesoría Jurídica; Santiago Fernández, letrado o alto ejecutivo, y la letrada Ana Zaforas. También, lo hará el ciudadano Juan José López. Todos ellos, testificarán antes de que lo haga el vicealcalde de Valencia, Alfonso Grau, que declarará como imputado.

La nueva diligencia ordenada por el juez está relacionada con la investigación realizada en Barcelona por Anticorrupción y un juzgado de esa ciudad. Todo lo actuado hasta ahora fue remitido al juez Castro por el fiscal Pedro Horrach.

Según el resultado de las pesquisas, basado en el testimonio del empresario español, Telefónica ingresó el 5 de diciembre de 2007 en su cuenta bancaria de Odessa (Ucrania) 12 millones de euros a través de la la entidad Cajasol.

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Alquiler de líneas

El concepto por el que se realizó ese abono es «alquiler de líneas», y el banco ucraniano exigió al sorprendido receptor de ese dinero 100.000 euros por los gastos ocasionados.

Según relata, el empresario intentó convencer a los directivos del banco ucraniano que era ajeno a esa transferencia, pero no los convenció. Por ello, y tras realizar múltiples gestiones y firmar un documento por el cual se negaba a recibir ese dinero, se vio obligado a «abandonar Odessa y dejarlo todo, es decir todo, y volver a España», subraya.

En julio de 2011, López envió un escrito al departamento jurídico de Telefónica exigiendo 1.575.071 euros en concepto de «importe de los daños» sufridos por el error en la transferencia de 12 millones. En marzo de 2012 rebajó esa cantidad a 50.000 euros como «colchón» para su madre; también pedía a Telefónica un trabajo, según las fotocopias reproducidas en esta misma página. Al no tener respuesta, el empresario decidió tirar de la manta y contar todo al juez. Dice que los 12 millones de euros están relacionados con Urdangarin, según le había comentado un alto ejecutivo de Telefónica con estas palabras: «No nos interesa estar en el ojo del huracán y mediáticamente nos puede perjudicar enormemente». Fuentes judiciales han otorgado un crédito muy escaso al relato de Juan José López, pero el juez Castro, que califica la transferencia de «controvertida», le quiere escuchar en Palma.