Así, los socialistas reclaman máxima transparencia sobre las cuentas del Palacio de Congresos e instan en el gobierno del PP a hacer pública la cantidad total pendiente de pago, así como el dinero que se debe a consecuencia de la decisión unilateral de la administración de paralizar las obras hace ahora dos años.
El PSIB ha denunciado que cada día que pasa, «tenerlas paralizadas le cuesta dinero a los ciudadanos de Palma», 470.265 euros cada mes según datos del conseller de Turismo, lo que puede sumar más de 10 millones adicionales desde que ordenaron paralizarlas en julio de 2012.
La portavoz socialista en el Ayuntamiento de Palma, Aina Calvo, ha pedido explicaciones «ya que no se entiende que una vez pagada toda la deuda con la empresa, no se ordenara la reanudación de las obras, como no se entiende que a nadie del equipo de gobierno le preocupen los millones de euros más que ha costado tener las obras paradas durante estos dos años», ha destacado.
La portavoz socialista se ha referido también a la financiación de las obras y ha recordado que se tenían que financiar con fondos estatutarios procedentes de Madrid y recogidos en el Estatuto de Autonomía. «Como se puede confiar en un gobierno que no cumple la ley ni exige su cumplimiento» se ha preguntado Calvo, quién ha criticado «la desidia y sumisión del PP balear con respecto a la financiación de las obras», ha lamentado.
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