Esta actividad genera un movimiento aproximado de alrededor de más de 8.000 turistas, que realizan numerosas compras en los comercios y también excursiones por la Isla.
Los buques que operan este invierno en Mallorca son el Costa Diadema, de Costa Cruceros, y El Aida Mar, de Aida Cruises. Ambos responden a dos conceptos distintos de viajar por mar. Así, el primero de ellos opera con turistas en tránsito, mayormente italianos, con pequeños embarques de grupos en Palma, mientras que el segundo, destinado al turista germano, realiza embarque y desembarque en Mallorca en conexión por vía aérea a través de Son Sant Joan desde sus respectivos lugares de procedencia en Alemania.
En tierra, una de las excursiones más solicitadas por esta época del año es la del casco antiguo, con tiempo para compras; un itinerario que incluye el Castell de Bellver y la Catedral. Aparte de los itinerarios programados, muchos de estos cruceristas optan por realizar visitas por su cuenta.
Durante este mes más de 30.000 cruceristas pasarán por el puerto de Palma.
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