El alcalde de Palma, José Hila, y el vicepresidente del Govern, Biel Barceló, durante la rueda de prensa que han ofrecido este martes para explicar la situación en la que queda el Palau de Congressos de Palma tras el informe emitido por la UIB. | Joan Torres

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El Ajuntament de Palma pedirá al Consejo de Administración del Palacio de Congresos que no ratifique el el concurso mediante el cual se adjudicó la instalación palmesana a la oferta de Barceló. Así lo ha explicado el alcalde de Ciutat, José Hila, tras el informe emitido la mañana de este martes por la UIB, según el cual el proceso de adjudicación que se realizó durante la pasada legislatura «no sería legal». Además, la adjudicación a la oferta del Grupo Barceló podría suponer una perdida de casi 80 millones de euros en los próximos 37 años.

El alcalde de Palma, que ha comparecido ante los medios de comunicación acompañado por el vicepresidente del Govern Biel Barceló, ha señalada que tanto el hotel adjunto como el Palau de Congressos podrían volver a salir a concurso, y ha insistido en que la intención de Cort es que la instalación pueda abrir sus puertas en 2016.

Cort se está planteando dos posibilidades para convocar este nuevo concurso público. La primera propondría la explotación privada del palacio y del hotel, pero manteniendo la titularidad pública de ambos, y la segunda apostaría por un modelo mixto mediante el cual se alquilaría el hotel y se mantendría la explotación pública del Palau de Congressos.

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José Hila ha precisado que «el informe UIB revela irregularidades administrativas, así como otras responsabilidades que se estudiarán». Según ha explicado el alcalde, la oferta de Barceló -que pagaba más de alquiler que la de Melià- le podría salir mal al ajuntament. El grupo hotelero podría comprar desde el primer día el hotel por una cantidad 20 millones de euros inferior a la de Melià, además de no presentar garantías de mantener a largo plazo la gestión del Palau.

Esto supondría una pérdida de 80 millones de euros para Palau de Congressos en 37 años, ya que en caso de que Barceló comprase el hotel, Cort pasaría a recibir 300.000 euros en concepto de alquiler en lugar de 1.750.000. Ésto, unido a los 20 millones menos que pagaría por la compra del hotel, supondrían una pérdida para el Ajuntament de casi 80 millones.

Por su parte, Biel Barceló ha señalado que «ahora» se podría dar un «nuevo concurso, estableciendo las bases correctas», o una gestión directa por parte de la Administración del Palacio, «poniendo el hotel en alquiler», cosa que también «implicaría un nuevo concurso» y «permitiría externalizar una parte de los servicios».