Teresa Palmer, este viernes junto a los mandos policiales, en la reunión mantenida para coordinar el dispositivo de seguridad del caso Nóos. | Picasa

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La delegada del Gobierno en Baleares, Teresa Palmer, ha informado este viernes que un grupo operativo de la Policía Nacional de Valencia -unos 50 funcionarios- se unirán al dispositivo que ya está desarrollando la Jefatura Superior de Baleares para cubrir el macrojuicio del caso Nóos que empieza este lunes en el Polígono de Son Rossinyol.

Así lo ha explicado Palmer en una rueda de prensa junto al jefe superior de Policía Nacional de Baleares, Antonio Jarabo, que ha tenido lugar tras reunirse con él para concretar los detalles de la operación.

Jarabo ha explicado que el operativo será «mayor en número de efectivos» a cuando la infanta Cristina declaró en la fase de instrucción de este caso, momento para el que se desplegaron unos 200 policías.

A pesar de esto, ha expresado que por nivel de dificultad «se han hecho cosas más grandes» en Baleares, como lo fue -ha dicho- el juicio por el caso Kabul donde se juzgaron a más de 50 acusados en la mayor operación contra el narcotráfico en la Comunidad autónoma.

El jefe superior ha explicado que el lugar donde se celebrará el juicio «es mejor» para desplegar las unidades ya que «es más abierto y no tiene alturas» como sí ocurre en los Juzgados de Vía Alemania donde la Infanta Cristina fue a declarar en febrero de 2014.

Además, Jarabo ha concretado que la seguridad de la Infanta corresponde al Cuerpo Nacional de Policía por lo que «se integrarán a su dispositivo y punto».

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Asimismo, la delegada del Gobierno también ha avanzado que no habrá «medidas especiales para ninguno de los acusados» a excepción del exsecretario del Instituto Balear de Turismo (Ibatur), Miquel Àngel Bonet, que permanece ingresado en prisión por el llamado caso Ibatur.

Palmer también ha querido recalcar la colaboración de la Policía Local de Palma que ayudará en «tareas de cortes en el tráfico y reserva de espacio» y la de la Seguridad Privada contratada por el Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJB) «para controlar los accesos».

De esta manera, ha concretado que habrá «un doble filtro de seguridad», uno en la planta baja y otro en el acceso a la sala de la audiencia» donde podrá haber 38 personas como público que «deberán someterse a todas las medidas de seguridad» como cacheos y escáneres.

«LA SEGURIDAD ELECTRÓNICA NO AFECTARÁ A LAS COMUNICACIONES»

Además, ha dicho que las «medidas de seguridad electrónicas en modo alguno van a afectar a comunicaciones» y por lo tanto y atendiendo, «al principio de publicidad» al que se somete esta vista oral, según ha precisado Jarabo, «se facilitará en todo momento el trabajo de medios».

Desde el CNP -ha incidido Palmer- se busca que «no haya incidentes ni dentro ni fuera del juicio, garantizar la seguridad de los asistentes y que el juicio se desarrolle con la «más absoluta normalidad y desde la independencia judicial».

Según ha concretado, el operativo ya se ha iniciado «con controles previos de seguridad ciudadana» y en él participan, entre otros, guías caninos, unidades de seguridad ciudadana, el grupo de motos, unidades de reacción y la tercera Unidad de Intervención Policial (UIP) de Valencia que se desplazará a Palma en los próximos días.