María del Lluc Forteza (izquierda), una de las encausadas, y Amanda Badillo, del grupo de apoyo a las feministas. | Pere Bota

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Defender el aborto en una iglesia puede conllevar pena de cárcel. Feministes Palma solicita la absolución de las seis personas encausadas por la irrupción proabortista que tuvo lugar en la iglesia de Sant Miquel en febrero de 2014. El próximo 29 y 30 de septiembre tendrá lugar el juicio en la Audiencia Provincial de Palma.

Amanda Badillo, del grupo de apoyo, y María del Lluc Forteza, encausada, convocaron un acto en el mirador de la Seu dónde solicitaron la absolución para las seis jóvenes acusadas. Fiscalía pide un año y medio por un delito contra la libertad de conciencia y sentimientos religiosos, mientras que el Obispado de Mallorca solicitaba cuatro años de cárcel para cada encausada. Tras la salida de monseñor Salinas, los abogados del clero están a la espera de las indicaciones de Sebastià Taltavull, el obispo sustituto.

Badillo destaca que «la pena de prisión que se pide «es desproporcionada» y sostiene que esto es «un acto político porque la persecución a ciertos colectivos no es casual. Lo que se está juzgando realmente es el derecho de las mujeres a la lucha».

En cuanto a la opción de disculparse, la encausada opina que «aunque van a esperar al juicio, no pedirán perdón al Bisbat por unas actuaciones que fueron muy conscientes y con una razón concreta».