Pasajeros frente a una oficina de Vueling el pasado verano en Ibiza. | Redacción Digital

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La Dirección General de Consumo del gobierno balear ha sancionado a la aerolínea Vueling con 340.000 euros por retrasos y cancelaciones producidas entre junio y julio de 2016, que afectaron a 191.000 pasajeros de las Islas Baleares, y por ignorar los requerimientos de la Administración.

La consellera balear de Salud, Patricia Gómez, ha informado en la rueda de prensa tras el Consell de Govern de esta sanción, que es «la multa más elevada» impuesta por Consumo en materia área en las Islas Baleares.

Según ha explicado Gómez, el total de la multa se divide en dos: 320.000 euros por infracción «muy grave» por los retrasos y cancelaciones, y otros 20.000, considerada «grave» por «ignorar de forma reiterada» el requerimiento de la Administración para aportar información necesaria para aclarar las situaciones ahora sancionadas.

Vueling vulneró la Ley 7/2014 de protección de las personas consumidoras y usuarias, lo que se considera una falta «muy grave» «el incumplimiento generalizado» de los contratos de transporte aéreo firmados con cada uno de los pasajeros de Baleares, por el elevado número de perjudicados por las incidencias sistemáticas y por la posición dominante en el mercado.

Tras la sanción, la aerolínea dispone ahora de un mes a partir de la fecha de recepción de la notificación para interponer recurso de alzada ante la consellería balear de Salud.

En cuanto a la multa de 20.000 euros, ignorar los requerimientos de la Administración pública está tipificado como infracción «grave» por la Ley 7/2014 de protección de las personas consumidoras y usuarias, detalla el acuerdo aprobado hoy por el Consell del gobierno balear.

Contra dicha resolución, la aerolínea puede interponer también recurso de alzada.

Según los datos facilitados por la Dirección General de Puertos y Aeropuertos que recoge la resolución de Consumo, durante junio y julio del año pasado, el 66,4 % de las 2.411 operaciones de Vueling con origen o destino en Baleares sufrió algún tipo de incidente (1.558).

Ello motivó que el 23 de septiembre de 2016 se abriera un expediente sancionador a Vueling Airlines.

Entre el 1 de junio y el 31 de julio, de las 1.339 operaciones programadas en Mallorca, 774 (65,9 %) sufrieron retrasos y 29 (2,2%) se cancelaron.

En Menorca, de los 670 vuelos previstos, 382 (57 %) operaron con demora y 6 (1 %) fueron cancelados, y en el caso de Ibiza, se habían programado 721 operaciones y 402 (55,76 %) sufrieron retrasos y 10 (1,39 %) fueron anuladas.

Estas incidencias generaron sólo entre junio y julio 123 reclamaciones, una cifra que aumentó a 460 a finales de año.

En el expediente sancionador se han considerado circunstancias agravantes el elevado volumen de ventas de la aerolínea, líder en el mercado nacional en los nueve primeros meses de 2016 con una cuota de mercado del 29 %, y la afectación a vuelos con declaración de obligación de servicio público (OSP), como en el caso de los Madrid-Menorca.

Entre los atenuantes, ha detallado Gómez, se ha tenido en cuenta la corrección de los hechos, ya que posteriormente no se han vuelto a producir, y la reparación parcial a los consumidores.

En este sentido, ha señalado que se ha compensado al 64 % de los clientes que reclamaron ante Consumo entre junio y julio.

No obstante, Vueling tendría que haber compensado a todos los afectados, hubieran o no reclamado.