Este hecho, según explica el director general de Pesca y Medio Marino, Joan Mercant, «nos obliga a buscar soluciones tecnológicas que permitan la actividad pero atenúen o supriman sus aspectos más nocivos».
Tal como indican desde el Govern, en diciembre de 2011 el Instituto Español de Oceanografía (IEO), junto con Simrad Spain, la Cofradía de Pescadores de Mahón y la Dirección General de Medio Rural y Marino del Govern pusieron en marcha un proyecto de desarrollo tecnológico pesquero con el título 'Nuevo sistema para la reducción del impacto de la pesca de arrastre de fondo en las costas españolas del Mediterráneo'.
Para tener una primera toma de contacto con este sistema, Mercant se embarcará esta madrugada en una jornada de pesca de la embarcación Nueva Joven Josefina, del puerto de Mahón, «pionera» en este tipo de aparejo e «imprescindible» colaboradora en este proyecto.
Este proyecto se basa en la utilización de unas puertas que no entran en contacto con el fondo marino y que al mismo tiempo no implican ninguna modificación importante en el resto de elementos de la pesca.
Esta alternativa, acompañada de otras pequeñas modificaciones reducen la fricción de los elementos de pesca y, por lo tanto, rebajan su resistencia a ser remolcado y evitan el daño en el fondo marino, explican.
Según Mercant, «se puede considerar que el proyecto se encuentra en una primera etapa, que consiste en la demostración científica y práctica de la idoneidad». «Nuestra intención es implementar el uso generalizado en todos los barcos de arrastre de Baleares», ha explicado.
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