María Salom ha defendido que la Carta Magna es una «ley fundamental» que puede reformarse «siempre que se tenga claro para qué y con qué motivos"; para ello es preciso de un «amplísimo consenso» de los partidos políticos.
La delegada del Gobierno ha recordado que la Constitución española solo tiene una vigencia de apenas cuatro décadas, muy lejos de los más de 200 años de la Constitución de Estados Unidos o del más de siglo y medio de las cartas magnas alemana o francesa. Por ello, Salom ha insistido en que «antes de iniciar cualquier camino a posibles cambios, tenemos que tener bien claro qué es lo que pretendemos hacer».
La delegada del Gobierno ha ofrecido este miércoles un discurso con ocasión de la celebración del 39 aniversario de la Constitución Española en un acto institucional que se ha celebrado en el Palacio de la Almudaina de Palma, donde se han reunido las principales autoridades de Baleares.
Con ocasión de su intervención, Salom ha comentado que incluso es posible que, para solucionar las actuales tensiones territoriales, sea «suficiente» con la «actualización» del modelo autonómico a través de la Comisión territorial del Congreso de los Diputados o en la Conferencia de Presidentes. Salom ha reconocido que España vive unos momentos «muy duros y complicados territorialmente, donde nuestro Estado de las Autonomías está siendo puesto en entredicho por una minoría».
Se trata, ha continuado, de «una minoría irresponsable que actúa fuera de la ley y que utiliza todo tipo de artimañas para buscar una legitimidad que se le niega, no sólo por la inmensa mayoría de los españoles, sino también desde el resto de organismos e instituciones europeas y mundiales». También ha subrayado que la Constitución española es «tan amplia y generosa que ampara a aquellos que no la reconocen».
«Es una norma fuerte, con una estructura tan sólida y clara que ha permitido aplacar el peor ataque a nuestra democracia en los últimos 35 años sin aspavientos, sin prisas ni atajos, respetando los pilares del Estado y la separación de poderes», ha afirmado Salom.
En este contexto ha destacado la intervención del Rey del día tres de octubre en defensa de la Constitución y la legalidad vigente y ha subrayado que «la Corona ha vuelto a jugar su trascendental papel con independencia».
También ha resaltado las decisiones del Gobierno en su respuesta sin «alarmismos ni estridencias» al desafío secesionista en Cataluña y el papel de la Justicia, que ha seguido su «camino inexorable» a la hora de exigir las «oportunas responsabilidades» de las actuaciones que «cada uno decide emprender».
Además, Salom ha advertido de que sin consenso ni diálogo «no es posible construir un futuro mejor para nuestros hijos» y, en este sentido, ha apostado por un diálogo y negociación «serios» dentro de la ley.
«Apostemos por lo que nos une, tendamos la mano a todas las formaciones respetuosas con nuestras leyes, con nuestras normas de convivencia y veamos entre todos qué necesita este país, cómo podemos mejorar la vida de los españoles», ha planteado Salom.
En la parte final de su discurso, la delegada del Gobierno ha apostado por la defensa de los intereses de Baleares, la aprobación del nuevo REB (Régimen Especial de Baleares) y la modificación del sistema de financiación.
Este acto institucional ha comenzado a mediodía con la lectura de varios artículos de la Carta Magna por parte de seis lectores representativos de la sociedad balear: el abogado del Estado Santiago Rodríguez Miranda, la jueza Sonia Vidal, el periodista Manuel Aguilera, la guardia civil Inmaculada Abad, la policía Francisca Veny la alumna de tercero de Primaria Carmen Campoy.
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