TW
10

El 82 % de los enfermeros que solicitaron participar en la oferta pública de empleo del IbSalut para puestos de auxiliar de enfermería tienen la titulación de catalán B1 o superior establecida como requisito para poder optar a las plazas.

Según los datos facilitados por el Servicio de Salud autonómico, de las 2.810 solicitudes presentadas, 2.305 cumplían la exigencia lingüística, 423 han quedado excluidas por no acreditar el conocimiento de catalán preceptivo y 82 han sido descartadas por incumplir otros requisitos.

Un portavoz del IbSalut ha precisado que los excluidos por motivos lingüísticos para poder optar a las 253 plazas de las oposiciones que se celebrarán en el segundo trimestre de 2018 son un 15 % del total de aspirantes.

El organismo público ha difundido estos datos para responder a la crítica al requisito de conocimiento del catalán planteada este jueves por el Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE).

Este sindicato ha explicado que la mayoría de los técnicos excluidos tiene un nivel A2, que les permite dominar y entender expresiones relacionadas con asuntos de relevancia inmediata y participar en el intercambio directo de información, por lo que pueden mantener una conversación en catalán con un paciente que se dirija a ellos en esta lengua.

«La exigencia de niveles tan altos de conocimiento lingüístico está negando a los usuarios la posibilidad de ser atendidos por profesionales fundamentales», ha advertido el SAE.