La Comisión de Hacienda del Parlament aprobó una propuesta para pedir a la Sindicatura que hiciera un informe sobre la actividad de la empresa que gestiona el matadero entre el 8 de octubre de 2012 y el 9 de octubre de 2017, pero la Sindicatura dice que no, porque esa labor requiere una investigación que excede sus competencias.
Señala que las informaciones facilitadas por el Ajuntament apuntan a la posibilidad de que haya habido doble contabilidad. Este control supera sus competencias porque supone realizar una investigación sobre terceros.
Sin embargo, sí considera que algunas de las informaciones que ha facilitado el Ajuntament «llaman la atención». Cita, por ejemplo, el «notorio» aumento del déficit total de la explotación de la actividad, que pasa de 267.562 euros en 2015 a 558.458 en 2016.
También considera relevante que el pasivo corriente pase de 641.042 euros a 937.771 euros en el mismo periodo o que el aumento del capital circulante pasara de un 19.848 euros negativos a 279.958 en esas fechas. Por último, menciona el aumento del saldo de deudas del grupo, que pasa de 31.255 euros a 286.339 euros en las mismas fechas.
El escrito de la Sindicatura de Comptes se hace eco de un informe del interventor del Ajuntament en relación con una «eventual» situación de «desencaje» entre el déficit de explotación de la empresa y la realidad de las operaciones «por una posible ocultación de facturación o de ingresos o por otras prácticas, como el destino de los recursos a actividades distintas de las que son su objeto».
En el escrito de respuesta a la petición del Parlament, los síndicos señala que todo ello es motivo de revocación y reintegro de la subvención «siendo procedente el inicio de un expediente de reintegro de la misma».
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