Se da la circunstancia de que Baleares cerró el mes de agosto en el año 2017 con un superávit de 310 millones de euros, lo que equivalía al 1,03 por ciento del PIB.
En esta ocasión, además de Baleares, nueve comunidades autónomas registraron superávit hasta agosto encabezadas por Canarias, con un 1,59 por ciento, seguida de País Vasco (0,68 por ciento), Asturias (0,60 por ciento), Galicia (0,57 por ciento), La Rioja (0,44 por ciento), Madrid (0,17 por ciento) y Andalucía y Cantabria (0,10 por ciento en cada caso), mientras que Cataluña se mantuvo invariable.
Por el contrario, registraron déficit las demás regiones con la Comunidad Foral de Navarra a la cabeza con -0,45 por ciento, seguida de Región de Murcia (-0,44 por ciento), Castilla-La Mancha (-0,43 por ciento), Extremadura (-0,32 por ciento), Castilla y León (-0,25 por ciento), Comunidad Valenciana (-0,17 por ciento) y Aragón (-0,01 por ciento).
A finales del mes de agosto, las comunidades autónomas presentaron un superávit de 1.689 millones (0,14 por ciento del PIB), frente al superávit de 728 millones registrado en agosto de 2017 (0,06 por ciento del PIB).
Según explica el Ministerio de Hacienda, esta evolución se debe entre otras causas a la liquidación definitiva de 2016 con un saldo a favor de las comunidades de 8.855 millones, 205 millones más que la liquidación definitiva de 2015.
Por su parte, el déficit del conjunto de las administraciones públicas se situó en 26.674 millones de euros en los ocho primeros meses del año, lo que equivale al 1,95 por ciento del PIB, un 14,6 por ciento menos que el año anterior, mientras que el déficit del Estado hasta septiembre se redujo hasta los 13.245 millones de euros, equivalente al 1,09 por ciento del PIB, 0,38 puntos porcentuales menos.
La reducción del déficit del Estado se debe fundamentalmente al incremento de los ingresos un 8,3 por ciento, hasta 145.233 millones de euros, frente al alza del 4,9 por ciento de los gastos no financieros del Estado, con un total de 158.478 millones hasta el tercer trimestre.
De su lado, la cifra de déficit público excluye el saldo neto de las ayudas a instituciones financieras, que a finales de agosto es positivo por importe de 66 millones, frente a los 335 millones del año anterior.
En el desglose de los datos del déficit público, la Administración Central alcanzó un déficit de 20.164 millones en los ocho primeros meses del año, el 1,66 por ciento del PIB, descontada la ayuda financiera, mientras que las comunidades autónomas registraron ese superávit de 1.689 millones en agosto, frente al superávit de 728 millones del año pasado, por esa liquidación definitiva de 2016 con un saldo a favor de las regiones de 6.885 millones.
En el caso de los fondos de la Seguridad Social presentaron un déficit del 0,43 por ciento, un 25,6 por ciento inferior al registrado en el mismo periodo del ejercicio anterior.
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