Los operarios comenzaron a trabajar en Son Valentí a finales del pasado mes de octubre. | Jaume Morey

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La Empresa Funeraria Municipal (EFM) ya ha iniciado los trabajos para adecentar el Sector II del cementerio, la parte más antigua. El gerente de la EFM, Jordi Vilà, explica que en esta primera fase invertirán 530.000 euros para mejorar la accesibilidad y evitar que los ciudadanos tengan que pisar tumbas para poder visitar a sus difuntos.

Las obras comenzaron a finales de octubre y ya se pueden ver algunas mejoras de accesibilidad. Está previsto que los trabajos duren tres meses, aunque las lluvias están provocando algunos retrasos.

Vilà informa que han declarado la caducidad de 335 unidades de enterramiento: algunas se han suprimido para ganar espacio y otras se han reformado para poder disponer de ellas. Además, se han realizado 54 permutas, es decir, se han cambiado tumbas de este sector por otras ubicadas en otros espacios del camposanto.

La eliminación de estas tumbas permitirá ganar espacios y habilitar viales.

Una de las actuaciones más destacadas que se llevarán a cabo es la reordenación de la plaza Ramon Llull. Se eliminarán los parterres con la finalidad de liberar espacio y poder celebrar actos al aire libre, se pondrán bancos y pérgolas. Además, se reconstruirá una capilla en ruinas en la plaza del Polvorín y se reordenará el espacio: se abrirán dos pasos y una puerta al exterior.

Esta parte del cementerio, Son Tril·lo, fue inaugurado en el año 1821 y tuvo un crecimiento desordenado, que ahora se intenta corregir.