Un mes antes de que comience la Navidad, las calles de Palma se han llenado de ciudadanos que ya han realizado buena parte de las compras típicas de esta época. | Jaume Morey

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Un mes antes de que comience la Navidad, muchos ciudadanos ya han realizado buena parte de las compras típicas de esta época. Y, a diferencia de hace años, las han adquirido a un precio rebajado. El Black Friday, de origen norteamericano, ha llegado para quedarse y ya se ha consolidado como uno de los días de más ventas del año, en el que los consumidores adelantan sus compras de Navidad.

Al hablar de ‘día negro’ no se hace en sentido literal ya que el Black Friday se prolonga hasta una semana en algunas ocasiones, aunque generalmente la mayoría de comercios iniciaron las rebajas este viernes y las mantendrán todo el fin de semana. Mañana es festivo de apertura comercial en las Islas, elegido expresamente para aprovechar el tirón de este fenómeno.

Todos los comercios y de todos los sectores lanzan ofertas para impulsar las ventas durante estos días, si bien los más beneficiados de esta jornada son las grandes superficies y el comercio online. Así lo constatan las patronales del pequeño y mediano comercio de Mallorca, Pimeco y Afedeco, que reconocen que, a final de año, el Black Friday no se traduce en más ventas sino en un cambio de fechas a la hora de comprar. Además, se ven obligados a aplicar descuentos, «lo que supone un menor margen comercial», en palabras del presidente de Pimeco, Antoni Fuster. «Después del Black Friday se produce un parón y los primeros quince días de diciembre son flojos» explicó el presidente de Afedeco, Rafael Ballester. Sostienen, además, que el hecho de que el Black Friday no se limite ya a un solo día distorsiona sus cuentas de resultados y diluye los períodos de rebajas tradicionales. Aún así, se reivindican como una opción más para el consumidor y para ello cuentan con el apoyo de la Administración. Los dirigentes de Afedeco y Pimeco, junto a las autoridades, encabezadas por el conseller de Treball, Comerç i Indústria, Iago Negueruela, visitaron algunos establecimientos del centro de Palma a última hora de la tarde de este viernes.

En ese momento había una gran animación en las calles, a lo que ayudó que las luces de Navidad ya estuvieran encendidas desde el jueves. Por la mañana, en cambio, la afluencia de público en las vías comerciales de la ciudad era moderada. El hecho de que las ofertas se prolonguen varios días y el auge del comercio online causan efecto.

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Los carteles de Black Friday anunciando las ofertas en el interior estaban expuestos en prácticamente todos los escaparates del eje comercial palmesano. Y, en algunas tiendas, los dependientes informaban a los clientes de las rebajas que aplicaban. La mayoría de descuentos oscilaban entre el 20 y el 40 %, aunque en algunos casos eran superiores. También se ofrecían otro tipo de promociones, como vales para próximas compras.

Muchos de estos establecimientos seguirán aplicando los descuentos este sábado y este domingo. Precisamente se espera que la tendencia alcista de compras iniciada el jueves se mantenga estos días y especialmente hoy cuando muchos ciudadanos no trabajan.

Las grandes superficies, por su parte, constataron el impacto positivo que supone el Black Friday. Las ventas evolucionaron a buen ritmo a lo largo de la jornada de este viernes, incluso por encima que en la misma época del año anterior. Esa tendencia positiva también la registraron a través de sus páginas web. Los representantes de la patronal estatal Anged en Baleares reconocen el cambio de hábitos que ha supuesto el Black Friday en las compras y destacan que implica no solo un traslado de las fechas sino un mayor consumo.

Y es que una sociedad que se define como ‘de consumo’ no es impermeable a los mensajes y ofertas comerciales que inundan calles, medios de comunicación y redes sociales con motivo del Black Friday. La gente compra más de lo habitual en estos días, y en eso coinciden todos los comerciantes. Para unos, solo supone un adelanto; para otros, un gasto adicional.

Ante esta vorágine comercial, asociaciones de consumidores e instituciones públicas instan a la responsabilidad y una de las principales recomendaciones es elaborar listas para comprar solo lo necesario. También advierten de que hay que ir con cuidado ante posibles fraudes. Otras entidades como Ecologistas en Acción y Greenpeace hacen una llamada a no consumir.