El obispo Taltavull, el cardenal Ladaria y el déan de la Seu Teodor Suau. | M. À. Cañellas

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El cardenal Lluís Francesc Ladaria, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, ha oficiado este sábado en la Seu una misa de Acción de Gracias coincidente con la festividad de la Inmaculada Concepción. El pasado domingo 19 de agosto ya presidió una por su nombramiento en la parroquia de Nostra Senyora dels Dolors de su Manacor natal. Sin embargo, este sábado es la primera vez que oficia una misa en la Catedral de Mallorca desde que fue nombrado cardenal por el papa Francisco el pasado 28 de junio.

Monseñor Ladaria (1944) ostenta uno de los cinco cargos con más influencia dentro de la estructura actual del Vaticano. Es una persona de la absoluta confianza del Santo Padre y el mallorquín de mayor rango eclesiástico de toda la historia desde el cardenal Despuig, fallecido en 1813.

Celebración

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El cardenal Ladaria ha estado acompañado durante la celebración de este sábado por el obispo Sebastià Taltavull y por el déan de la Seu, Teodor Suau, entre otros canónigos y sacerdotes de la Diócesis, que le arroparon en esta ceremonia tan espacial, y que congregó a numerosos fieles, que no llegaron a llenar el templo.

Toda la celebración se ha desarrollado en mallorquín. Ladaria ha empezado la homilía afirmando que «generaciones y generaciones de fieles durante siglos han invocado a Dios por estas fechas. La fiesta que hoy celebramos es, precisamente, la plenitud de la gracia, el triunfo de la historia después de la caída original».

Ladaria mantiene un estrecho contacto con la Isla, donde residen sus familiares, y pasa sus vacaciones estivales en Porto Cristo, donde colabora con las tareas de la parroquia desde el anonimato.