El lunes coincidieron cuatro cruceros en Palma.

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Desde que Palma XXI y una veintena más de entidades ciudadanas presentaron el manifiesto en contra de los megracruceros en el puerto de la ciudad y que pide limitar su llegada a uno por día, ya se han recogido más de 10.000 firmas. Ha pasado un solo mes ya que el manifiesto se presentó el pasado 10 de junio y cuenta con el apoyo de personalidades como Maria del Mar Bonet, Agustí Villaronga, Segi Belbel, Jorge Dezcallar, Antoni Obrador y Miquel Barceló, entre otros.

El próximo lunes, las entidades que lo impulsan presentarán el resultado ante el Consolat de Mar y, previsiblemente, anunciarán los pasos que seguirán a partir de hora. El día de su presentación ya revelaron su intención de pedir reuniones con los nuevos gobernantes con el fin de trasladar el sentir ciudadano a los dirigentes políticos.

El manifiesto también reclama que se regulen las visitas de los cruceristas al centro de Palma con un máximo de 4.000 al día, además de exigir a Autoritat Portuària de Balears (APB) mayor control e información ambiental de este tipo de embarcaciones.

Precisamente, el pasado martes trascendió que el Gobierno central quiere utilizar drones para controlar, a través de sensores, el nivel de contenido en azufre de los cruceros que atraquen en puertos españoles. El objetivo será detectar si superan el nivel máximo permitido de 0,5 % en masa, que se exigirá a partir del 1 de enero de 2020.

Así lo explicó el Ejecutivo en respuesta a una pregunta parlamentaria de Unidas Podemos en la que se aludía a los puertos de Palma y Barcelona, que lideran el ránking de puertos «más castigados» en el estudio ‘Transport & Enviroment' que el pasado mes de junio dio a conocer la organización Ecologistas en Acción.