«Tenemos una sensación de responsabilidad más grande que nunca», afirmó ante la directiva la líder de los socialistas baleares y presidenta del Govern. Francina Armengol también reflexionó sobre la quiebra del gigante touroperador Thomas Cook: «Hemos sido capaces desde las instituciones y la sociedad civil de tomar medidas inmediatas para paliar los efectos negativos, sobre todo para los trabajadores».
Por su parte, el presidente del PP balear, Biel Company, recordó que «el PP propuso una serie de medidas a las pocas horas de producirse la quiebra de Thomas Cook» e insistió en que «la prioridad ha de ser ofrecer un futuro laboral a los trabajadores afectados de manera directa, pero también indirecta, por el hundimiento del touroperador».
Además, Company pidió la suspensión temporal del cobro del Impuesto de Turismo Sostenible hasta mayo de 2020 para «ayudar a la competitividad de Baleares como destino turístico tras la quiebra».
Los últimos pagos
Según el diario británico Financial Times, el gigante empresarial Thomas Cook pagó más 20 millones de libras a diferentes asesores en los últimos días antes de declararse en quiebra. El objetivo del touroperador era, según esta noticia, conseguir un acuerdo de rescate de 900 millones de libras a cambio de repartir todos los negocios entre sus accionistas.
5 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Es el turista el que paga la ecotasa, no el hotelero ni Thomas Cook. No es lógico devolver a los hoteleros una tasa que no han pagado ellos, y para colmo es una tasa contra la que siempre han estado los hoteleros en contra. Nos tomáis el pelo descaradamente.
@Johnny tus fundamentos son cábalas, tal vez el turismo vive gracias a mi
@Full , como te puedes alegrar de esto? , vives directa o indirectamente de ello, aunque seas presunto profesor o funcionario y pienses que no.
El oportunisto politico o lo que es lo mismo la bajeza de nuestros presuntos pseudopoliticos
Si tuvieran un poco de sentido común, un poco de amor hacia Mallorca y un poco de visión de futuro, se alegrarían de la quiebra, porque ahora puede ser un buen momento para disminuir el turismo que nos agobia.