El doctor Iñaki Llopart con parte del equipo de Urgencias de la clínica Rotger. | Teresa Ayuga

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El hecho de prepararse con antelación para la llegada de los pacientes COVID y haber separado claramente los circuitos respecto al resto de enfermos ha facilitado que las clínicas de QuirónSalud puedan empezar a programar de nuevo la actividad sanitaria no urgente con toda las garantías para los pacientes.

Vuelven las consultas externas que se seguirán alternando con las teleconsultas para evitar que los usuarios coincidan en las salas de espera. También se reprograman las cirugías no urgentes de forma escalonada.

«Los que tienen que operarse, deben acudir sin miedo porque se hace de forma segura», explica el doctor Iñaki Llopart, jefe del Servicio de Urgencias de Clínica Rotger y especialista en medicina intensiva.

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«Nos tenemos que ir adaptando día a día porque no sabemos mañana lo que nos espera, son preguntas de las que la comunidad científica no tiene respuesta», añade el doctor que, sin embargo, recuerda la importancia de ir recuperando a los pacientes que llevan un mes y medio en hibernación.

Por otra parte, advierte de que las Urgencias, que en Rotger eran de 350 0 400 diarias, han bajado. «Entiendo que las patologías banales no vengan, aquí había gente joven con dolor de cabeza. Pero también hay menos patologías graves como infartos o ictus. Es cierto que vemos menos traumas porque hay menos accidentes pero lo que es lógico es que sigan las enfermedades coronarias».

Según este especialista, la gente espera mucho en su casa antes de acudir a urgencias por miedo al contagio. «Hemos visto a pacientes con apendicitis pasadas, a un niño con meningitis y fiebre alta… A veces es por la falta de información, sobre todo en gente mayor que cree que venir es peor y esperan», explica. De ahí que se insista en enviar un mensaje de tranquilidad a la población. «Es más seguro venirse a operar aquí que ir a comprar al supermercado», asegura. «Hay medidas para que los quirófanos funcionen perfectamente. A todo el mundo se le hace la prueba de diagnóstico del coronavirus, no hay que tener miedo de retomar las cirugías programadas», añade el doctor Llopart. El grupo QuirónSalud además está realizando el test a todos sus trabajadores.