Los sindicatos afirman que habrá recortes de plantilla docente para el próximo curso y usted lo niega.
—Basta mirar las nóminas para comprobar que no hay recortes. Partimos de la cuota docente del pasado curso y estamos acabando de negociar el incremento de plantilla, también en la concertada. El debate podrá ser si el incremento es poco o mucho, pero no será si hay o no recortes. Considero que el incremento será significativo. Desde 2015 hemos aumentado la plantilla en 1.500 docentes, 350 el pasado curso. Cuando los centros nos presenten sus planes pedagógicos y de contingencia, sabremos con cuántos docentes debemos contar.
¿Qué balance puede hacer del último trimestre?
—Ha sido un trimestre maldito, fuera de la normalidad, no ha habido alegría, no se ha posibilitado un final adecuado, ha quedado diluido. Se ha perdido la esencia de la educación, que es la presencialidad. La escuela nació para ser presencial. En educación son importantes los contactos, las miradas, los abrazos, la convivencia, la socialización. Ha sido una pesadilla, un curso para olvidar, pero también para aprender.
Así, ¿se han podido extraer conclusiones positivas?
—Por supuesto. Hay que poner en valor el esfuerzo y la capacidad de adaptación de toda la comunidad educativa. Ahora, de cara al próximo curso, tenemos la preparación previa, también en la Conselleria. Un nuevo confinamiento no es deseable, pero ahora podríamos darle respuesta. Debo recordar que, en las fases 2 y 3, hemos tenido más 43.000 alumnos en tutorías. En el actual Programa d'Acompanyament –refuerzo del verano– tenemos 7.000 alumnos, los mismos que Andalucía, con una población ocho veces mayor. Balears es de las comunidades que más ha hecho en tutorías y refuerzos. Y en buena parte, ha sido así por la propia iniciativa de los docentes.
Tras la experiencia, todo el mundo apuesta ahora por la presencialidad. ¿Están sobrevaloradas las clases ‘on line'?
—No diría eso. Para el próximo curso planteamos la posibilidad de que, en Bachillerato y FP, cuatro días a la semana sean presenciales y el quinto, on line. No hay que renunciar a las herramientas telemáticas. La digitalización es necesaria. Por ello hemos aumentado la conectividad de los centros, hemos comprado más ordenadores, pantallas digitales y otras herramientas tecnológicas. La digitalización no debe ir contra la presencialidad, sino complementarla. La Universitat está mucho más preparada para este reto y puede aplicar un sistema mixto, pero hacerlo todo digital sería un error. En cualquier caso, debería darse una adaptación a cada titulación.
¿Ha habido un aprobado general? En las pruebas de selectividad ha habido un 30 % más de alumnos.
—No, con rotundidad. Ha habido un mayor número de aprobados en toda España porque ha habido una mayor flexibilidad con unos alumnos que no tenían la culpa de lo que estaba ocurriendo. No lo veo mal. El tercer trimestre se planteó como una oportunidad para mejorar la nota, pero, más allá de lo académico, las circunstancias fueron excepcionales. Las tarjetas para las becas de comedor, con 5 euros diarios desde finales de marzo hasta finales de junio, han sido clave para la alimentación de muchas familias con dificultades económicas y sociales.
Los sindicatos también han criticado las instrucciones para el próximo curso.
—Son unas instrucciones pedagógicas y, no lo olvidemos, sanitarias, teniendo en cuenta que el riesgo cero no existe. Hay centros públicos y concertados con más de mil alumnos y debemos garantizar la salud, que será el campo de batalla del próximo curso Es lógico que los docentes sientan la responsabilidad y cierto temor.
¿Tiene que haber fondos COVID para la concertada?
—Sí. Los fondos tienen que llegar también a la concertada, tal como ya hemos hecho con las becas de comedor, las ayudas a la etapa de 0-3 años, los ordenadores y los refuerzos educativos.
Los módulos de la concertada llevan congelados desde 2008.
—Sí, deben incrementarse, pero también replantearse las cuotas voluntarias, hacerlas más simbólicas. Falta completar la equiparación de los docentes concertados con los públicos, pero con los primeros hemos incrementado salarios y plantillas, con más de 200 profesores desde 2015.
¿Nos podemos encontrar en los próximos años con más necesidades y menos recursos?
—Los próximos años serán complicados y habrá que reorientar las prioridades del Govern.
¿Cree que la Llei d'Educació será aprobada con consenso?
—Espero aprobarla en el último trimestre de 2021 con el máximo consenso posible, educativo y político, y en el marco de la ley estatal. Hemo trabajado el anteproyecto durante dos años.
DNI
- Nació en Pollença en 1954.
- Catedrático de Sociologia de l'Educació i Pedagogia Social de la UIB, fue director general de Universitat entre 1999 y 2003.
- Fue vicerrector de Planificació i Coordinació de la UIB entre 2007 y 2011, con Montserrat Casas como rectora.
- Durante más de 15 años ha sido director del Departament de Pedagogia de la UIB. También ha dirigido el Anuari de l'Educació.
- Es madridista y le gusta leer novelas y caminar por el campo.
43 comentarios
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La enseñanza no es solo aprender "cosas" bien online, bien presencial. La enseñanza es o debería ser el amor por una materia que te inculca la persona que la imparte. Los profesores son mucho más que máquinas de repetir temas y de poner y corregir exámenes. Y conste que no pertenezco al gremio, pero admito que tuve mejores profesores de los que han tenido mis hijos.
Los que necesitaban apoyo con alguna asignatura han perdido mucho por el confinamiento ..debería tenerlo en cuenta de cara al próximo curso ..la enseñanza online no es lo mismo que la presencial
Dimita señor March es usted un mediocre conselller de educación, usted al final pertenece a una casta familiar que aspiran al poder como su hermano que secretario general del GOB y después alcalde del pueblo con más ilegalidades urbanísticas en rústico de Mallorca, esto si en vez de denunciar a muchos pueblos de Mallorca en temas urbanísticos deberían la familia March en denunciar más a su pueblo que tienen más de 1200 expedientes ilegales en rústico, y que además con estas ilegalidades hacen negocio de alquiler vacacional, en fin una auténtica hipocresía, por lo tanto dimita porque el profesorado que la mayoría han sido sus votantes están hartos de su mala gestión ahora ya no hay excusa que la gestión es del PP.
Todo un engendro de una sociedad , de una casta intelectualoide y pancatalanista encerrada en si misma que maneja los hilos de todo lo que ocurre en Baleares. Basta ver su curriculum endogamico. Si tuviera que salir fuera de sus paisos catalanes a buscarse la vida acabaria pasando hambre.
Hem de dir, que tots es polítics de nivell nacional i autonòmic, i es catalanistes i nacionalistes MES, han anat i duen es seus fills a escoles privades o concertades, ja que tenen clar que a ses públiques es nivell és MES baix, i amb es tema dels idiomes i sa resta estàn en el segle XIX. La mateixa ministra Celaa i tots els presidents de la generalitat i els seus fills vàren anar a escoles privades o concertades bilingües o trilingües, i sa Sra. Celaa va possar es trilingüisme a Euskadi, i es socialistes es blingüisme a Andalussia, però a Mallorca es socialnacionalistes estàn venuts al adoctrinament catalaniste de un país una sola llengua i així nos va. També el que passa es que a s'escola concertada, sa nefasta comunitat educativa de sa nova escola catalana verda adoctrinadora de sa història sectària, no hi poc ficar mà, i això fa molt de mal. Vergonya cavallers, vergonya.
Cuando habla de replantearse en subir las cuotas voluntarias debe referirse a los recibos que cobra por ejemplo el colegio Cide a todo alumno y que ponen " donación " los cuales si no se pagan no puede asistir el alumno ¿ no ?
Madridista y pancatalanista a la vez, no se, es una mezcla muy rara la verdad.
La enseñanza online ha sido positiva en muchos aspectos, muchos alumnos habrán aprendido a planificarse y organizarse y, lo más importante, se han dado cuenta de que la tecnología no sirve sólo para chatear, jugar y ver series sino que es una herramienta muy útil para trabajar que seguro necesitarán en el futuro. Una educación mixta online-presencial sería lo más adecuado para empezar el curso, al menos para los alumnos más mayores
no discuto que faltaran recursos, en numero de profesores, material, etc pero con esto de la pandemia se le ha visto el plumero a mas de un docente. La mayoria de los profesores de mis hijos programaban para el lunes el envio de un email con deberes y hasta la proxima semana, ni un solo video explicando nada, solo corrigieron los deberes de las 2 primeras semanas de confinamiento, luego no devolvieron corregida ninguna tarea hasta final de curso. Excepcion, un profesor que si les mandaba videos explicativos, y si les devolvia corregidos los deberes con comentarios y notas. Uno entre mas de una docena. Ahora en julio y agosto vacaciones para los profes mientras los padres hemos tenido que trabajar, en muchos casos, tambien con nuestro ordenador, con nuestro movil, y haciendo de profesores de nuestros hijos, explicandoles ecuaciones y reglas ortográficas porque los que se supone se dedican a ello estaban totalmente ausentes.
Si tant involucrats estan els professors de la pública amb la docencia i tant sacrificats són que han possat la cadira de ca seva, l'electricitat de ca seva, l'internet de ca seva, perquè envien els seus fills a la criticada escola pública ?. Haurai d'esser obligatori escolaritzar als fills de professors públics en escoles públiques.No vulguis pels altres el que no vols pels teus.