Así lo ha anunciado la presidenta del Consell de Mallorca, Catalina Cladera, en una rueda de prensa tras la reunión del consejo ejecutivo. La presidenta ha explicado que calculan que «como mínimo» llegarán a la cantidad de 520 millones, a la espera de cerrar el ejercicio 2020 para poder inyectar esas cantidades en las cuentas del año siguiente.
De este modo, el consejo ejecutivo ha aprobado la propuesta inicial de 494 millones de euros, que representa un aumento del 2,4 % respecto a 2020, con 11,6 millones más. Cladera ha destacado que se trata del presupuesto más alto de la historia de la institución y ha insistido en la voluntad del equipo de gobierno de reforzar el estado de bienestar ante la crisis del COVID-19.
Este proyecto, que supone 145,5 millones más que en 2015 (+41,7 %), deberá aprobarse posteriormente en el pleno del Consell de forma definitiva.
La mitad de este presupuesto se destinará a políticas sociales (247,2). Las políticas sociales consolidadas crecen un 11 % respecto a 2020 (24,5 millones más).
Dentro de este apartado, Cladera ha destacado una dotación inicial de 20 millones para políticas directas de reactivación COVID-19, explicando que el presupuesto podrá seguir creciendo durante 2021.
Las políticas de recuperación económica también marcarán el ejercicio, en un año condicionado por la pandemia de COVID-19. A políticas estrictamente económicas se destinan 124,1 millones, y a las medioambientales 42,6 millones.
El Consell de Mallorca se endeudará durante el ejercicio 2021 por primera vez desde 2012, con 21,7 millones de euros, para paliar la bajada de la aportación del Govern en el marco de la crisis.
La contribución del Govern condiciona en gran medida las cuentas del Consell, porque representa casi un 60% de los ingresos de la institución insular. Mientras, el endeudamiento que se va a adquirir supone un 4,4%.
Cladera ha subrayado que esta decisión se toma con una situación financiera «totalmente saneada» en el Consell y con el objetivo de «proteger las políticas sociales».
La deuda viva del Consell ha bajado de forma continuada desde 2012, cuando se situaba en 213,5 millones, y experimentó una notoria bajada entre 2016 y 2017 -de 98,6 a 21,9 millones-. Este 2020 era de 9,6 millones. Con el endeudamiento proyectado, alcanzará los 30,3 millones, superior a la de 2017.
Por otro lado, las otras fuentes de ingresos del Consell son la aportación estatal, que representa un 28,5% para 2021 y prácticamente se mantiene, sumando 141 millones; e ingresos propios como cánones, tasas y precios públicos (46 millones) que representan un 9,3%.
Cladera ha considerado que hay aspectos de la normativa que regula la financiación de los Consells -del año 2014- que se deberían reformar a medio plazo para «asegurar un mínimo de fondos más estable».
El conseller de Hacienda y Función Pública, Josep Lluís Colom, ha detallado el gasto previsto para 2021 en cada departamento, destacando algunas partidas. Derechos Sociales se lleva el 45,1% del gasto, con 223 millones, resaltando la incorporación de personal para dar cobertura a la demanda en dependencia, tercera edad, menores y otros apartados.
El siguiente departamento con mayor peso en el gasto es Movilidad e Infraestructuras, con 99,2 millones, un 20,1% del total. En este punto, Colom ha destacado que se apuesta para 2021 por contratos de mantenimiento de vías y no obra nueva.
También ha indicado que el departamento de Iván Sevillano tiene como «reto» para este año la creación de una estación provisional de ITV que pueda llevar a cabo revisiones mientras se construye la nueva estación de Calvià.
A continuación se sitúan los departamentos de Hacienda y Función Pública (57 millones), Promoción Económica y Desarrollo Local (33 millones), Cultura, Patrimonio y Política Lingüística (25,8 millones), Presidencia (18,9 millones), Turismo y Deportes (16,6 millones), Sostenibilidad y Medio Ambiente (11,2 millones) y Territorio (9,4 millones).
Esta propuesta inicial también recoge el presupuesto destinado a organismos como el Instituto del Deporte Hípico de Mallorca (3,4 millones), la Agencia de Defensa del Territorio (2,6 millones), el Consorcio Serra de Tramuntana (1,8 millones), el Consorcio Museo Marítimo Mallorca (0,5 millones) y las Fundaciones Mallorca Turisme (6,4 millones) y Teatre Principal (6 millones).
2 comentarios
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Si no me equivoco, la "suspensión de las reglas fiscales" es un eufemismo para más deuda, con lo que tendríamos un titular más transparente y fácil de entender.
ASUSTA pensar cuanto van a dedicar a potenciar la LENGUA DISEÑADA PARA ARRINCONAR A NUESTRA LENGUA EL MALLORQUÍN... ASUSTA. Y es NUESTRO dinero.