Imagen del centro de salud de Camp Redó.

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El director del IB-Salut, Juli Fuster, ha avisado este martes de que la atención telemática en Atención Primaria «es parte del futuro», si bien «no por su condición de filtro sino para resolver problemas de manera más sencilla y ágil».

Así se ha expresado Fuster durante su comparecencia ante la Comisión de Salud para informar sobre la situación actual y las medidas previstas en Atención Primaria, solicitada por el PI por vía de urgencia en octubre.

El director del IB-Salut ha repasado las adaptaciones realizadas en el servicio, augurando que «estas innovaciones han llegado para quedarse».

Con todo, Fuster ha pedido disculpas por la «pérdida de accesibilidad» para la población que han supuesto los cambios implantados debido a la COVID-19, como los dobles circuitos que implicaron «tener que prescindir de la asignación de personas por facultativo o enfermera"; pero ha defendido que esa medida fue «totalmente necesaria» y que «evitó contagios».

El director del IB-Salut, Juli Fuster, durante su comparecencia en el Parlament
El director del IB-Salut, Juli Fuster, durante su comparecencia en el Parlament.

El director del IB-Salut ha aclarado que actualmente «esta situación está recuperada» aunque se mantiene la necesidad de realizar filtro telefónico para proteger tanto a profesionales como a usuarios.

A largo plazo, el IB-Salut trabaja en soluciones para la atención telefónica como llamadas de salida por centralita única, directamente por IP desde ordenadores, y modernizar la línea en general de Atención Primaria.

Por otra parte, Fuster ha indicado que el plan de infraestructuras contempla la construcción este año de cinco centros de salud -Bons Aires, Son Ferriol, Artà, Pollença y Trencadors- y cuatro unidades básicas -Santa Margalida, Consell, Sant Joan y Montuïri-. En la segunda fase se prevé construir otros nueve centros y unidades, entre ellos el de Pere Garau.

El director del IB-Salut ha destacado también la puesta en marcha del rastreo de casos de COVID-19 para cortar cadenas de transmisión. Actualmente trabajan en Baleares 400 rastreadores, de los que 96 son militares, que hasta este miércoles han rastreado 29.446 casos de más de 130.000 contratos estrechos; un total de 30.162 se confirmaron como caso positivo. En la última semana, se han rastreado 196 casos y 972 contactos.

Igualmente, el director del IB-Salut ha resaltado los dispositivos de cribado, que han ejecutado una veintena de cribados poblacionales masivos, con pruebas a más de 50.000 personas. Estos cribados permitieron cortar más de un millar de cadenas de contagio.

Futuro modelo

Fuster ha explicado que plantean «un nuevo modelo de atención» que no será «estático», enfocado a resolver la mayoría de problemas de salud desde atención primaria. Según ha explicado, el IB-Salut ya estaba «inmerso» en este cambio organizativo, pero la COVID-19 ha frenado algunos aspectos aunque ha acelerado otros.

Este futuro modelo contempla que los servicios de admisión sean «los verdaderos agentes administrativos de la población adscrita"; introducir la figura de técnicos en cuidados auxiliares de enfermería; posibilitar que las enfermeras «desarrollen totalmente todas aquellas funciones para las que se han estado formando"; y dotar «de tiempo y tecnología a los médicos de familia y pediatras».

Además, prevén potenciar la figura de otras profesiones sociosanitarias -farmacéuticos, odontólogos, higienistas, psicólogos, trabajadores sociales, fisioterapeutas y comadronas- y se valora «en un futuro próximo» incorporar en los centros de salud médicos de otras especialidades, podólogos o educadores físicos, entre otros.

Paralelamente, Fuster ha incidido en que Atención Primaria «tiene un papel primordial en el Plan de Vacunación», y ha afirmado que están preparados para poner 100.000 vacunas semanales.

Otras actuaciones en el horizonte son un plan de formación para médicos de familia en ecografía clínica,