Roldan, con camisa rosa, ayer en Palma acompañado de otros ‘amengualistas’. | Antoni Pol

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El enfrentamiento y la falta de acuerdo entre ‘melianistas' y ‘amengualistas' mantiene bloqueado el congreso que el PI anunció para el 25 de septiembre, y en el que se debe escoger al sustituto de Antoni Amegual. En ese contexto, el aspirante ‘amengualista' a presidir la formación, Toni Roldan, cargó ayer contra los ‘melianistas', les acusó de «no haber hecho nada» y señaló que, de acuerdo con los estatutos, se dispone a asumir la presidencia del partido en funciones (hasta el congreso).

Las discrepancias entre los bandos se centran ahora en la legalidad y efectividad de las decisiones tomadas por la ejecutiva balear, que debe aprobar el reglamento del congreso y desbloquearlo. La semana pasada se convocaron dos ejecutivas, una cada bando. La de los ‘melianistas' no consiguió reunir el quórum establecido (11 personas) y en consecuencia no adoptó acuerdo alguno.

Quórum

La que trae polémica es la que convocaron los ‘amengualistas'. Ellos aseguran que hubo quórum necesario y que se aprobó el reglamento del congreso, pero los ‘melianistas' niegan que se contara con el mínimo de 11 miembros para que lo acuerdos adoptados sean válidos.

Por otra parte, los ‘melianistas' convocaron una ejecutiva de Mallorca, también la semana pasada, en la que dicen que reunieron el quórum necesario y se aprobó el reglamento del congreso de esta Isla, que se aplazó hasta el 2 de octubre (inicialmente era para el 25 de septiembre).

Por otra parte, Toni Roldan ofreció este miércoles una rueda de prensa en la que acusó a los ‘melianistas' de querer boicotear el congreso. Explicó que el martes viajó a Menorca para reunirse con Tolo Gili ('melianista') para consensuar un reglamento para el congreso. Dijo que llegaron a acuerdos en todos los aspectos salvo en la renuncia de Melià a todos sus cargos, que los ‘amengualistas' exigían. Sin embargo, criticó Roldán, Gili se desdijo ayer de lo acordado y le pidió pensárselo hasta el fin de semana. Gili desmiente a Roldán y niega que cerraran un acuerdo.

Hay muchas discrepancias entre unos y otros: si las listas deben ser abiertas (como pretenden los ‘melianistas') o cerradas, si las personas que se han afiliado al PI con posterioridad a la convocatoria del congreso deben o no poder votar, si se podrá votar telemáticamente o la fecha del congreso.

Según Roldan, los ‘melianistas' «no quieren que los afiliados voten». Por su parte, los ‘melianistas' dicen que la salida pasa por alcanzar un acuerdo entre las dos partes.