De hecho, el pasado curso en Baleares se concedieron 6.500 becas generales y 3.800 becas NESE, dirigidas a alumnos con necesidades educativas especiales. Como ya se pudo constatar el pasado curso 2020-21 también se prevé un aumento de solicitudes debido a la situación económica derivada de la pandemia de coronavirus que atraviesan muchos hogares, además de la ampliación de criterios.
Entre las novedades de la convocatoria del Ministerio para este curso destaca que los estudiantes universitarios podrán acceder a una beca para cursar el grado o un máster habilitante con una nota media de 5 puntos, en lugar de los 6,5 exigidos hasta ahora, según el real decreto de umbrales de renta y cuantías de ayudas al estudio. De hecho, está prevista a nivel nacional una inversión de 2.038 millones de euros para 460.000 becas de estudiantes de enseñanzas no universitarias y 390.000 universitarias para el próximo curso, lo que supone 138 millones más que el pasado año y un 24,5 % más de beneficiarios.
La convocatoria para solicitar las becas para estudiar está abierta hasta el próximo 15 de octubre. Puede consultar los plazos, cuantías y condiciones en este enlace.
El dinero llega tarde
El retraso de las becas es un viejo problema de la educación en España. Los perceptores de las ayudas reciben las cuantías cuatro o cinco meses después del inicio del curso. En muchas ocasiones el primer ingreso no suele llegar hasta pasado Navidad. El Ministerio todavía no ha conseguido arreglar este problema que perdura durante ya hace algunas décadas.
Los estudiante solicitan la beca entre septiembre, un plazo máximo de hasta el 15 de octubre. Es decir, con el curso ya empezado y sin una previsión económica. Es a partir de octubre cuando el Ministerio empieza la revisión de solicitudes, y los estudiantes reciben el primer ingreso como pronto en diciembre. La burocracia retrasa el pago: la cuantía variable (una segunda parte de la beca que se reparte en función de los resultados académicos y otras variables) que esta llega en en mayo.
La último reforma del Ministerio de Educación y Universidades, impulsada por Manuel Castells, lucha por que el próximo año 2022-23 ningún estudiante empiece el curso sin saber si podrá beneficiarse de la beca. Se trata de una reforma de la gestión administrativa que la que se adelantará la notificación de la resolución sobre la solicitud de becas. De esta forma los estudiantes podrán saber antes del inicio del curso si cumplen los requisitos económicos para recibir o no estas ayudas y planificar así su curso académico.
8 comentarios
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Jaume ra... Disculpa que me meta, pero me gustaría aclarar donde van a parar el 70% de los fondos a becas. Las becas las recibe ahora mismo gran parte de ellas el colectivo inmigrante. Tienen unas medias bajísimas y es evidente que no se sacarán ese estudio al que acceden en el 95% de los casos. Pero se matriculan, les dan la beca, la cobran y a los dos meses ya no los vuelves a ver. Ese dinero se está malgastando y dando a personas que no lo aprovechan para la finalidad que tenían en un principio. Pero bueno, sigamos con el buenísimo, la hipocresía y la falta de crítica, que nos está yendo perfecto.
Los umbrales de las rentas de las becas son demasiado bajos para que accedan los hijos de trabajadores. Aprox. Una familia de 3 miembros no puede tener ingresos anuales superiores a 32.697 € y una de 4 miembros no puede superar los 38.831 €, y eso para tener únicamente exención de matrícula, para recibir dinero, los umbrales aún son mucho más bajos. Con lo cual las becas solo son accesibles a familias en la pobreza absoluta y a autónomos y empresarios que no declaran ingresos. Se hace muy necesario un informe previo de los servicios sociales de los ayuntamientos, que certifiquen la condición de las personas. Por debajo de según que niveles de renta es imposible vivir, pues hay quien declara 0 ingresos ( y son los que más cobran en becas) , por lo tanto, además de los requisitos establecidos en la convocatoria ( que están muy bien) se debe aduntar un informe de los asistentes sociales de los ayuntamientos que acrediten que efectivamente esas personas viven en el nivel de pobreza que declaran. Es bien sencillo de hacer, pues más de la mitad ya no solicitarían la beca y, de los que quedaran, la mayoría, con esos niveles de ingresos tan bajos suelen ser bien conocidos por los asistentes sociales, por lo que no necesitarían mucho trámite. Un simple informe del asistente social que dé fe que la persona efectivamente vive en las condiciones de necesidad. Basta una visita al domicilio.... Una familia que declara 3000 € anuales no puede vivir en un chalet, con piscina y tres coches... Y hay muchos de estos....!
Antes la beca era un premio al esfuerzo, ahora se la dan a los que tienen renta baja sin mirar su esfuerzo y rendimiento escolar. Le deberían llamar cualquier cosa menos beca, subvención a fondo perdido por ejemplo.
Sr Moreno te veuen ses canyes !!! Nomes vols veure estudiar ses elits , no senyor han de poder estudiar TOTS el qui tenen doblers i els qui no. Sa veu que voste per sort no demana becas ja que van lligades a uns resultats
Molt bona notícia, cada vegada ens pareixem més als estats del nord d'Europa. Democratitzar l'educació és primordial, també aprofitar el potencial humà i que no recolleixin els fruits els estats del nord. Si noltros invertim en educació, després no han d'emigrar els millors i que es quedin aquí els que no saben fer res
Otra tomadura de pelo. En vez de valorar la capacidad del alumno y exigirle objetivos, miramos la renta familiar, aunque el niño no valga para estudiar, eso es lo de menos. Al final para quien son las becas?: Basicamente se la llevan los grandes defraudadores que pasean con el bolsillo lleno de pasta y coches de alta gama, que ganan 10 y declaran 2. La mayoria autonomos y trabajadores con la mitad de la nomina en negro. El trabajador con un sueldo medio totalmente declarado, que paradojicamente es el que mas aporta al sistema, no tiene derecho a ayudas, y estamos hablando de nominas normales. Porque los umbrales marcados rozan la pobreza, no es posible vivir con ella a menos de que te entre una parte en B.
Es que la educación debería ser gratuita para todo el mundo. Gratis las matriculas, gratis los masters, gratis los libros (posibilidad de digitales) Aquí todo el mundo habla de pública pero es una pública pasando por caja. Y algún padre tiene que tirar de donde no puede para pagar matrículas y libros.