Las patronales anuncian que no se embarcará en las navieras ningún camión, salvo los de productos perecederos, en Barcelona, Valencia y Dénia. | R.L.

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La Federación de Transportes de Mercancías de Balears, englobada en la patronal FEBT, y la Asociación de Distribuidores Asociación de Empresas Distribuidoras de Alimentos, Bebidas y Productos de Limpieza de Balears prevén que la huelga de transporte anunciada para los días 19, 20 y 21 de diciembre, convocada a nivel estatal, será secundada en las Islas por toda la flota de camiones que desarrollan esta actividad y que está cifrada en 10.000 vehículos. El presidente de la federación de transportistas de mercancías, Ezequiel Horrach, señaló ayer: «La situación es insostenible por la actual normativa vigente y el incremento progresivo del precio de los combustibles, de ahí que nuestro colectivo está a favor de secundar la huelga convocada por el Comité Nacional del Transporte por Carretera».

Horrach añadió que la decisión final se adoptará el próximo día 2 de diciembre. «Este día tendremos en Palma una reunión, pero el 90 % de las empresas ya me ha comunicado que están dispuestas a paralizar toda su flota, que en el caso de nuestro sector será más de 8.000 camiones en Mallorca y resto de islas». A este número de camiones hay que sumar los que engloba la patronal del transporte de mercancías, que alcanzan los 1.500. El presidente de los distribuidores, Bartomeu Servera, puntualizó ayer: «Como colectivo de transportistas, apoyamos las reivindicaciones que se están realizando a nivel nacional porque la coyuntura que vivimos en estos momentos va en contra de nuestra actividad empresarial por los sobrecostes que tenemos que asumir por el aumento del precio de los combustibles».

Piquetes en los puertos

Ambas patronales de las Islas coincidieron en señalar que la huelga, al ser estacional, afectará de pleno a los puertos de embarque de mercancías a las Islas, caso de Valencia, Barcelona, Dénia y Tarragona, donde está previsto que en los tres días de huelga haya piquetes para impedir cualquier embarque de mercancías en las navieras Baleària, Trasmed y GNV, salvo las de productos perecederos. El anuncio de la huelga, según Servera, «ha provocado ya una avalancha de pedidos por parte de las empresas para adelantar la llegada de todo tipo de productos». Servera indicó sobre este punto: «No habrá desabastecimiento, pero faltarán productos, de ahí que las empresas que tenían previsto solicitar pedidos en la primera quincena de diciembre, los han adelantado a la próxima semana».

Las compañías Baleària y Trasmed (Grimaldi) han visto en estos últimos días cómo los transportistas han ido incrementando las reservas de ocupación en las bodegas de sus buques de cara a las dos próximas semanas. El puerto de Palma será uno de los grandes afectados por este volumen de tráfico de camiones de mercancías.

Punto de vista
Germà Ventayol

Empieza el carrusel

Germà Ventayol

Hace tiempo que no se oye hablar del otoño caliente, expresión clásica de las reivindicaciones laborales. La cosa, de momento, no va de trabajadores, va de empresarios a los que no les salen los números. Me da que los transportistas son los primeros, pero no serán los únicos. Y los trabajadores todavía no han empezado. Convendría que el Gobierno se ponga las pilas si no quiere que este otoño haga demasiado calor.