La presidenta del Govern. | Redacción Digital

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La presidenta del Govern, Marga Prohens, ha asegurado este martes en el Parlament que, en el análisis de los datos del informe PISA de educación relativos a Baleares, «no se ve la correlación entre tener más de una lengua de enseñanza y sus resultados». En el turno de control al Govern en el pleno del Parlament, la portavoz del grupo Vox, Idoia Ribas, ha preguntado a Prohens si, a partir de los datos del informe PISA, considera que la lengua de enseñanza tiene impacto en el rendimiento académico de los estudiantes.

Prohens ha manifestado su preocupación por el hecho de que los datos revelen que Baleares empeora en matemáticas, ciencia y lectura. «Los datos nos interpelan a todos», ha afirmado. La presidenta ha asegurado que, analizando el informe PISA, hay comunidades monolingües con peores resultados que las islas y comunidades bilingües como Galicia con mejores resultados, por lo que «no se desprende que tener dos lenguas de enseñanza tenga un impacto sobre los resultados».

Ribas ha replicado que el informe PISA «vuelve a recalcar la importancia de la lengua materna en el proceso de aprendizaje» y ha citado la referencia a «las barreras» que suponen para los inmigrantes «no estudiar en su lengua materna». Según la diputada de Vox, aunque esa referencia del informe es hacia los inmigrantes, «en España es aplicable a los nativos, castellanohablantes, que en el fondo son tratados como inmigrantes al imponerles de forma obligatoria estudiar en las lenguas regionales de Cataluña, País Vasco y Baleares».

Ribas ha atribuido los mejores datos de rendimiento de los estudiantes de la Comunidad de Madrid respecto a los de Baleares a que a los de las islas «se les está negando la educación en castellano» y ha pedido a Prohens que «termine con la imposición del catalán en las aulas». Prohens ha repetido que el Govern cumplirá su palabra, en relación con el acuerdo con Vox sobre elección de lengua en los centros, pero ha precisado que los resultados de PISA sitúan a Baleares en la media del estado, en un ranking en el que «no se ve la correlación entre tener más de una lengua de enseñanza y sus resultados».

«Tener dos lenguas es una riqueza y una suerte para nuestros estudiantes y para nuestros ciudadanos», ha afirmado la presidenta balear. Prohens ha recalcado que «el Govern hará todo lo posible para mejorar la calidad en la educación» y por eso una de las primeras medidas que adoptó fue la recuperación de las notas numéricas «para recuperar la cultura del esfuerzo, para devolver a los docentes su papel evaluador y para facilitar a las familias el seguimiento de sus hijos». Además ha destacado otras medidas como el debate iniciado con la comunidad educativa para limitar y restringir el uso de móviles y pantallas en las aulas «que es un clamor de las familias y la sociedad».