Imagen de la reunión entre Marga Prohens y miembros de la OCB. | Pere Bota

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El primer encuentro de la legislatura entre la presidenta balear, Marga Prohens, y el nuevo presidente de la Obra Cultural Balear (OCB), Antoni Llabrés, ha acabado con el anuncio de movilizaciones contra su política lingüística. «Será la primera protesta en la calle, el domingo 5 de mayo, cuando termine el Correllengua en la Plaça Major de Palma», ha señalado Llabrés tras la reunión, en la que ha vuelto a pedir, esta vez en persona, que el Govern «retorne al consenso estatutario del que no tendría que haber salido y que rompa con los acuerdos de la extrema derecha», en referencia a Vox.

Llabrés ha reiterado lo que estos meses ha ido pidiendo la entidad, como que Prohens deje de «ir de la mano de un partido que solo busca acabar» con la cultura de Baleares, y le ha advertido que no hacerlo «pasará factura» al Govern. «Hemos criticado las medidas regresivas que se han aplicado en estos ocho primeros meses en todas las instituciones en las que el PP gobierna con el apoyo o en coalición con Vox», ha afirmado el presidente. Ante la negativa de Prohens a sus peticiones, Llabrés ha asegurado que la OCB «hará uso de todos los instrumentos de los que disponemos».

La reunión, que se ha producido en el Consolat de Mar, se esperaba breve, pero ha superado la hora y media. Según Llabrés, la cita se ha desarrollado con respeto institucional. Ambas partes han expuesto sus ideas, aunque el presidente de la OCB ha dicho que los argumentos de Prohens en defensa de sus políticas no le convencen. «Si no hay una apuesta de los poderes públicos para promocionar la lengua en un momento de máxima fragilidad, la situación se complicará más. Hay que hacer políticas para que la gente recién llegada se haga suya la lengua propia del país», ha defendido Llabrés.

Prohens reivindica la política del Govern

Prohens, tras una rueda de prensa posterior a la reunión, ha calificado como «cordial» el tono de su reunión mantenida con la OCB y ha reclamado hacer del catalán una lengua «más amable» frente a los que la usan como «herramienta de confrontación». También ha señalado que este encuentro se enmarca en el «respeto institucional» que tiene el Govern con la OCB, con la que ha resaltado que se ha reunido en dos ocasiones desde que es la presidenta, a raíz del cambio en la presidencia de la asociación cultural.

Prohens ha destacado especialmente este «gesto», ya que ha apuntado que era «importante» adelantar esta reunión con respecto a otras que tiene en agenda, un avance que ha estado motivado por el ascenso de Antoni Llabrés a la presidencia de la OCB. Asimismo, la presidenta ha indicado que esta reunión se ha mantenido desde «los diferentes puntos de vista» de cada parte y que ha servido para rendir cuenta de las diferentes acciones lingüísticas que ha emprendido el Govern, como las actuaciones del Institut d'Estudis Baleàrics (IEB), entre las que ha citado el curso de catalán para sanitarios al que se han inscrito más de 200 profesionales.

«La lengua no es patrimonio de ninguna opción política y las opciones políticas que intentan patrimonializar la lengua le hacen mucho daño y deberían de dejar de hacerlo», ha señalado. En ese sentido, ha apuntado que el Govern debe apostar por el catalán, como marca el Estatut d'Autonomia, a través de «el incentivo y la promoción» para hacer una lengua «más atractiva y más amable». «La política lingüística de los últimos años ha fracasado si se atiende a las cifras», ha subrayado, a lo que ha agregado que su Govern «no impone, sino que incentiva e invita a amar la lengua».