Ofensiva parlamentaria en contra de Prohens y el PP por su política de transparencia

El último episodio es el caso del director general de Transparencia, Jaume Porsell, propietario de un agroturismo que se anunciaba en un portal turístico antes de obtener licencia. La presidenta Prohens incluso asistió a una fiesta que se presentó como «de inauguración».

Prohens, la consellera de Presidència, Antònia Estarellas; el vicepresidente Antoni Costa; la consellera de Vivienda, Marta Vidal –a quien la oposición presenta como la primera consellera que incumplió normas de transparencia– respondieron a las críticas por este asunto, del mismo modo que el lunes ya lo hizo el portavoz del grupo parlamentario popular, Sebastià Sagreras. Iago Negueruela, Marc Pons, Pilar Costa y Carles Bona (PSIB) se refirieron a estas cuestiones; también Lluís Apesteguia (Més per Mallorca) y Cristina Gómez, de Unidas Podemos.

La respuesta de la presidenta y del resto de cargos de su Govern ha sido decir que el PSIB no era quién para dar «lecciones», recordaron el caso de las mascarillas y otros. Prohens aprovechó una de sus respuestas para referirse a dos asuntos que sabe que incomodan especialmente a Francina Armengol, anterior presidenta del Govern y actual de Congreso: el Hat Bar y «la complicidad en la explotación sexual de menores». Esta alusión provocó protestas.

Sobre el caso de Porsell, desde el Govern se ha insistido han dado «todas las explicaciones». «No se incumple ninguna normativa, el agroturismo ni tiene actividad, ni beneficios, además [Porsell] no es administrador, hemos dado más explicaciones de este caso que Armengol de las mascarillas».

Más lejos que Matas

«Ni Jaume Matas se atrevió a tanto», dijo el socialista Marc Pons. Y según Pilar Costa, al vicepresidente del Govern «le tocan todos los casos chungos», que enumeró. Para otro socialista, Carles Bona, «estamos ante el PP de Matas», recordando que hubo varios casos de corrupción y que Porsell sustituyó en la alcaldía de Andratx a otro implicado en un caso de corrupción.

Según Apesteguia, también el ayuntamiento está implicado y las señales de tráfico informan de «un agroturismo ilegal». «Igual son no carteles para informar a personas que no quieren ir», ironizó. Prohens se quejó de la «estrategia del fango» de la oposición en este y otros asuntos.